Considera que el Cpccs transitorio tiene una misión fundamental, y que sus miembros cuentan con prestigio.
Para el catedrático universitario Ángel Torres Maldonado, el país necesita una reinstitucionalización para que el pueblo ecuatoriano vuelva a tener confianza en las acciones de las instituciones del Estado, especialmente en aquellas de control.
La designación de los vocales del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) transitorio, motiva también una opinión de Torres Maldonado, quien en la actualidad labora como docente en la Universidad de las Américas (UDLA), en Quito.
“La institucionalidad del país va más allá de las personas que ocupen transitoriamente una cierta responsabilidad”, aduce, indicando que las acciones que efectúen las autoridades transitorias deben realizarse en el marco del ordenamiento jurídico y del interés general del país.
A criterio de Torres Maldonado, el Ecuador ha vivido y continúa viviendo “una fuerte crisis de institucionalidad”, lo que hace que los ecuatorianos no confíen en las instituciones del Estado. Cree que esta actitud de desconfianza de los ciudadanos se debe a que de la parte política “se busca controlar los actos decisorios de estas instituciones, lo que lamentablemente le causa un grave perjuicio al Estado”.
El catedrático considera como idóneos a quienes fueron designados como vocales del Cpccs transitorio, porque “tienen un reconocido prestigio: profesional, ético, moral y de compromiso con el país”.
Como ecuatoriano, dice que espera que el Cpccs transitorio cumpla con el objetivo de “devolverle la confianza a los ecuatorianos en las instituciones del Estado”. Señala que eso lo puede hacer a través de acciones que estima fundamentales, como la selección de las autoridades para entidades como la Fiscalía, Contraloría, Consejo Nacional Electoral (CNE), Consejo de la Judicatura, superintendencias…
Asimismo, precisa que el Cpccs transitorio debe llevar a cabo una evaluación seria y objetiva que determine aciertos de las instituciones, pero también identifique falencias para tomar los correctivos del caso. Luego de ello, sugiere, se deben buscar a los “mejores ecuatorianos en función de su formación y de su compromiso ético con el país” para que ocupen los cargos.
Añade que quienes asuman funciones en las instituciones en las que podrían haber cambios, deben ser personas que no respondan a intereses de grupos políticos, económicos o de otra índole. Al contrario, menciona, “deben responder al interés general del país”. (JGN)
No confiamos en las instituciones del Estado”
Ángel Torres Maldonado
Docente universitario