Docentes analizan la Batalla del Pichincha y el Civismo

Programa. Darwin Valarezo (conductor), Franklin Orellana (docente) y Richard Ruiz (rector); participantes de Lojadebate.
Programa. Darwin Valarezo (conductor), Franklin Orellana (docente) y Richard Ruiz (rector); participantes de Lojadebate.

Se destaca la figura del joven ecuatoriano Abdón Calderón, como estratega.

La gesta de la Batalla de Pichincha fue la que dio el toque final de nuestra Independencia. Este acontecimiento ocurrió entre la tropa española y la tropa de la Real Audiencia de Quito (RAQ) en aquel entonces. La batalla ocurrió el 24 de mayo de 1822 en las faldas del volcán Pichincha, a más de 3000 metros sobre el nivel del mar, cerca de la ciudad de Quito.

Las tropas de la RAQ, estuvieron presididas por Antonio José de Sucre y por el general Melchor Aymerich; quienes con Abdón Calderón nos dieron la libertad. Personajes que tenían en mente el bien común y la libertad para todos.

Luego del proceso que se procuró, Sucre, dijo en su informe final del 25 de mayo por la tarde que se dio la posición de todo el departamento y la toma de 1100 prisioneros de tropa española, 160 oficiales, 14 piezas de artillería, 1600 fusiles, 400 cadáveres enemigos, 200 de la RAQ, 190 heridos españoles y 140 de la Real Audiencia de Quito.

Franklin Orellana, docente del Colegio 27 de Febrero, dijo que los españoles reconocieron a Abdón Calderón como uno de los mejores estrategas que tuvo América; y fue quien siguiendo ejemplo de otros estrategas mundiales nos otorgó libertad.

“Pensó en el bien común y por ello planificó la estrategia de rodear la montaña, pensando que los españoles los tenían al pie del cerro”, dijo Orellana.

Relación

Abdón Calderón tenía 18 años de edad, su padre era cubano y fue quien lideró la Independencia. Desde su juventud tenía esa idea de que su nación sea independiente. Cuando muere Calderón, Simón Bolívar lo haciende a capitán y posteriormente toda la pensión que obtenía le otorgaron a su madre de por vida.

El amor a la patria e ideales eran las causas más nobles por la que luchaban nuestros ancestros, manifestó Richard Ruiz, rector del Instituto Tecnológico Superior Beatriz Cueva de Ayora.

Es decir que estas causas nobles no tienen nada que ver con la edad, un claro ejemplo fue Abdón. “Hay personas que empiezan más temprano y otras más tarde, para ello se requiere de entrega y sacrificio. Cosas que nos muevan a luchar por la patria y el ser humano”, puntualizó Orellana.

Actualidad

Las luchas que se tienen ahora son diferentes a las de antes. Un país puede tener miles de ejércitos, armas, bombas; pero si no tienen un fin claro cómo la libertad de las personas, no tiene significado alguno.

Antes las batallas eran cuerpo a cuerpo, se planeaban estrategias, y quien lo planificaba mejor ganaba; y esto era muy simbólico para las personas de ese entonces.

Además, mencionaron una cita de Roger Soder, quien menciona que en democracia donde se colocan las exigencias del buen ciudadano para todos, solo las escuelas comunes pueden proporcionar a todos, la educación que necesitan.

En el siglo XVII las luchas independentistas eran por la libertad, ahora son por intereses económicos o políticos”

Richard Ruiz

Rector del Instituto Tecnológico Superior Beatriz Cueva de Ayora.

Hay desvalorización de los símbolos patrios”

Franklin Orellana

Docente del Colegio 27 de Febrero

El Dato

El programa Lojadebate lo dirigió Darwin Valarezo, periodista de La Hora.