Talía Guerrero Aguirre
Por lo general creemos que sabemos exactamente cuál es nuestro propósito en este mundo, craso error, en este contexto me llamo la atención una de las filosofía de vida, para tener una vida larga, joven y feliz practicada por los japoneses, llamada Ikigai. Su significado “Motivo para existir”, que pocos lo han encontrado y son conscientes de cuál es y otros lo llevamos dentro, pero todavía lo estamos buscando.
Una mujer se debatía entre la vida y la muerte, de pronto tuvo la sensación de ser separada de su cuerpo y creyó escuchar una voz que le preguntaba; ¿Quién eres? Contestó: soy esposa, madre y maestra; no te pregunté eso, sino quién eres tú, la mujer no parecía contestar adecuadamente la pregunta, hasta que dijo: soy quien se despierta cada día, para cuidar y amar a mi familia y ayudar a que se desarrollen las mentes de los niños en mi escuela; pasó la prueba y fue devuelta a la vida, a la mañana siguiente despertó sintiendo un profundo sentido de significado y propósito: había descubierto su Ikigai; quizá les distraiga examinar las diez leyes del Ikigai, con la curiosidad de saber lo que aman, para lo que son buenos, lo que necesitan y por lo que les pueden pagar: Mantenerse siempre activos, sin abandonar las cosas que aman y saben hacer; tomar la vida con calma, las prisas son inversamente proporcionales a la calidad de vida; no comer hasta llenarse, la alimentación para una vida larga “Menos es más”; rodearse de buenos amigos, son el mejor elixir para disolver las preocupaciones; ponerse en forma para el próximo cumpleaños, no estancarse; sonreír, una actitud afable hace amigos y relaja a la propia persona; reconectarse con la naturaleza, para recargar el alma; dar las gracias a sus antepasados, compañeros de vida y a la naturaleza; vivir el hoy, dejar de lamentarse por el pasado y de tener futuro; seguir el Ikigai, dentro de ustedes hay una pasión, un talento único, que da sentido a sus días. (O)