En un restaurante de la ciudad de Macará, capital del cantón de similar nombre, apareció una mujer muerta y en primera instancia se llegó a presumir que se trataba de un asesinato.
Al lugar llegó la Policía y encontró a un ciudadano, de 32 años de edad, en avanzado estado etílico, sentado sobre el piso de ese local.
A unos dos metros de donde estaba el ciudadano la Policía halló a una mujer, de alrededor de 22 años, sobre el piso y sin vida.
En el interior del baño se encontraba una persona de sexo femenino tendida por lo que procedieron a valorarla indicando que no tenía signos vitales.
La Fiscalía de Macará dispuso a la Policía el levantamiento del cadáver de la mujer, para comprobar la causa del deceso.
De acuerdo a informaciones sobre este caso se establece que la causa de la muerte, de acuerdo a la autopsia, es por una ingesta de una sustancia fosforada y la muerte presuntamente sería un suicidio.
Con estos resultados la Fiscalía se abstuvo de acusar por cuanto lo consideró un suicidio y dispuso la inmediata libertad del sospechoso.
EL DATO
El ciudadano tiene 32 años de edad; y la víctima 22.