Telebasura

Javier Espinosa

Los medios de comunicación son herramientas de gran influencia, capaces de alterar, incluso, la realidad social. No por nada su control es tan apetecido por los gobiernos de turno. Las sociedades de consumo tienen su base de sustentación en los medios de comunicación. Entre estos, la televisión, que si bien está siendo desplazada por el poder de los medios digitales, todavía cuenta con millones de consumidores alrededor de todo el mundo.

Revisando los contenidos de la televisión ecuatoriana, muy pocos podrían considerarse de valor –documentales, programas de entrevistas, periodismo investigativo-, y por el contrario, muchos deberían ser considerados como verdadera «telebasura». Por ejemplo, producciones nacionales, en donde se deforma a su mínima expresión el habla castellana, y que dicen ser «novelas». Lo curioso es que gozan de altos ratings de sintonía. Esto no da la pauta del nivel cultural de los ecuatorianos, en un país, en donde investigaciones demuestran que no se lee en promedio ni un libro por año. Triste, pero es la realidad. Por otro lado, están los «realities», tan de moda en el mundo de la televisión. Y en nuestro país, no podían ser la excepción, pero cosa curiosa, todos son franquicias, lo que devela nuestra incapacidad para generar productos propios y de calidad. También está la llamada «prensa rosa», con formatos mediocres, en donde el chisme y el escándalo son su razón de ser.

Un llamado a los medios de comunicación a cumplir su rol dentro de la sociedad. A educar en valores y, desde luego, a entretener. Y también a la ciudadanía, a ser más selectiva con los productos que consume. No olvidemos que una u otra manera somos lo que pensamos. (O)