Justicia a gotas

Kléber Mantilla Cisneros

Lo complejo de aplicar justicia en el país se parece a lo contradictorio de las protestas de estudiantes del Colegio Mejía y el enfrentamiento contra la Policía por la suspensión de un inspector después de que se filtrara un video de éste castigando con un fuete en los pasillos.

La justicia ha mejorado. Ante todo existe el enjuiciamiento penal en contra de un ex presidente de la República, un vicepresidente preso, un Contralor huido, un Fiscal destituido y la reapertura de procesos judiciales pero persiste aún la desconfianza ciudadana.

El secuestro del activista político Fernando Balda representa el lado más oscuro del correísmo. Una red de persecución de personas desde el Estado con complicidad a todo nivel: administrativo, político, policial, financiero, entre otros. Balda señala que su caso tiene dos etapas clave: su fallido secuestro en Bogotá y su posterior deportación en complicidad de autoridades colombianas.

La justicia tiene la obligación de investigar cada prueba, determinar responsables y penalizar. Es el inicio de la revisión de varios procesos judiciales con implicación directa del anterior gobierno, según la versión de agentes vinculados.

La fiscalización en la Asamblea no camina. El desvío de dinero recaudado para la reconstrucción de Manabí y Esmeraldas después del terremoto del 16 de abril de 2016 y la actuación de la Procuraduría en el regreso de la firma Odebrecht son temas que se empolvan.

El superintendente de Bancos es acusado de omitir controles y desvanecer una deuda de 2.400 millones de dólares del IESS. Las cuentas de los canales de televisión incautados muestran dispendio público y abuso de los hermanos Alvarado en su gestión.

Sin embargo, la compra de los helicópteros Dhruv en mal estado puede ser reactivada y desempolvarse. Esto por el ocultamiento del informe del asesinato de Jorge Gabela que confirmaría la relación de sus denuncias y su crimen.
El presidente Lenin Moreno lejano de revanchas y retaliaciones se muestra al margen pero no puede pedir ceguera ni desmemoria al país. Que la justicia haga su trabajo caiga quien caiga y que los asambleítas perciban que son observados en su letargo.

[email protected]
@klebermantillac