Richard E. Ruiz. O.
Cuando un niño o adolescente, adolece de una enfermedad por lo general es hospitalizado y requiere reposo médico, pero sus derechos educativos se deben respetar y su proceso de interaprendizaje debe continuar, considerando la igualdad de oportunidades, la no discriminación; pero del dicho al hecho hay mucho trecho.
Las Aulas Hospitalarias deben funcionar bajo el eje de brindar la mayor cobertura educativa y garantizar que los niños, niñas y adolescentes en situación de enfermedad, hospitalización y/o reposo médico prolongado, se mantengan en el sistema educativo. Hace pocos días, conocí a una niña que estuvo hospitalizada en el IESS más de una semana y no recibió la visita de trabajo social, ni de docente alguno. Existe en el área de pediatría una sala de juegos, y lo que más desearían los niños es recibir la visita de clowns hospitalarios, pero seguramente los guardias dirán que está prohibido y que siguen órdenes de los que nunca se enferman.
En fin, el papel aguanta todo, esperemos que el convenio firmado el día 18 de octubre entre el IESS y el Ministerio de Educación dé sus frutos. La realidad es otra: el familiar que esta con su hijo debe dormir en una silla. Empiecen humanizando la salud, enseñando a algunas enfermeras que su función no solo es administrar la medicación, sino aprender a manejar las emociones del niño, y que dejen de hacer juicios de valor ante la situación médica, como si fueran especialistas.
Las Aulas Hospitalarias son las unidades escolares surgidas dentro del hospital. Visiten las aulas hospitalarias, por ejemplo, del Hospital Baca Ortiz y comprenderán que no basta el convenio o tener una docente. ¿Conoce usted las aulas hospitalarias? ¿Cómo son los niveles de comunicación entre el centro escolar y el niño hospitalizado? La respuesta es simple: En Loja no hay aulas hospitalarias y están empezando dicen. En el país ya van más de dos años. (O)