El agua contaminada del río Zamora produce pestilencia. Los moradores no soportan y exigen soluciones.
La intensidad de los rayos solares que han caído sobre la ciudad los últimos días, provoca que el agua contaminada del río Zamora presente una fetidez insoportable para los habitantes del sector norte de la ciudad, especialmente en la ciudadela Sauces Norte, donde sus moradores claman por una acción que disminuya el olor nauseabundo.
En el sector está ubicada la escuela ‘Pompilio Reinoso’, donde según su directora, Orfa Armijos, afirma que los olores son tan fuertes que los niños presentan dolor de cabeza y se distraen en el salón de clases buscando como protegerse.
“Pese a que cerramos puertas y ventanas el olor no se disipa, esto no ha sido solo un día, incluso el olor persiste por toda la semana. Los niños muchas veces no pueden servirse los alimentos ya que la fetidez es demasiado fuerte”, puntualiza.
Problema
Una laguna artificial que está ubicada en el sendero Orillas del Zamora, a la altura del zoológico, represa el agua del río que contiene aguas lluvias y servidas, con la intensidad del sol se produce evaporación y sedimentación de residuos.
Cuando la represa se abre toda esta agua contaminada fluye hacia el norte de la ciudad provocando problemas ambientales.
Froilán Carrión, morador de Sauces Norte, menciona que el problema se ha agravado en los últimos meses ante la escasez de lluvias. Dice que los olores son tan insoportables que incluso hay días que no pueden cocinar y deben salir a alimentarse en otros sitios para huir del olor.
Explica que incluso muchas familias han decidido salir de la ciudadela y vender su casa para no tener que soportar esta contaminación.
“El Municipio sí tiene conocimiento de esta problemática pero no hace nada por solucionarla, no entiendo cómo dicen que hay mejoras y cobran valores por este servicio cuando en realidad no hay trabajo”, acota.
Planta de tratamiento
Darwin Macas, presidente de la ciudadela Sauces Norte, considera que hay falta de preocupación de quienes están encargados de medio ambiente ya que los desechos de la ciudad fluyen hacia el río y no hay un control del horario en que se realiza la apertura de la represa.
En las gestiones que ha realizado ha recibido la explicación de que cuando se construya la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales en el sector de Florencia habrá una solución, pero no hay plazos establecidos.
Oficial
Lucio Romero, gerente de la Unidad Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Loja (Umapal), explica que el problema se da por el crecimiento de la zona occidental de la ciudad, ya que las aguas no desfogan en el colector principal, por falta de espacio, y van a quebradas como la de Viveros, Shushuhuayco y más.
Detalla que la Umapal ha realizado un estudio de colectores marginales transversales. En la ciudad hay 14 quebradas desde La Argelia hasta Sauces Norte, mismas que deben ser embaucadas para conducir aguas al conector principal.
“El proyecto está listo para ser ejecutado, pero no se lo ha hecho por la falta de recursos. El costo es de 14 millones de dólares, solo así quedarían libres las quebradas para que circule únicamente aguas lluvias”, menciona.
Sin embargo, la construcción de esta obra no se realizará en la administración actual, por falta de presupuesto, y quedará para que la próxima administración pueda hacerlo.
Solución
Ya que la obra no se ejecutará en esta administración, la solución que proponen es la coordinación con el departamento ambiental para que el agua represada de la laguna se realice en horarios que no afecte a la población. (GAM)
EL DATO
Los niños de la escuela ‘Pompilio Reinoso’ están afectados por el problema ambiental.
TOME NOTA
En el sendero Orillas del Zamora, cerca al zoológico, existe una laguna artificial en la que se represa el agua.