Ulfer Alejandro Trelles Ordoñez
Gobernar es ejercer el control de un Estado, ciudad o colectividad, esta potestad parte de la confiabilidad del pueblo que le otorga a sus gobernantes, esperando obtener una administración justa, productiva y participativa, que no solo se quede en propagandas y en ofrecimientos de campañas políticas, o tan solo en el cumplimiento de una ley establecida para esto, pero sin sentir el espíritu de la misma, por todas estas circunstancias nace una nueva modalidad de administrar, llamada Gobierno Abierto fundada en la confianza ciudadana.
En la historia institucional del Ecuador, siempre se ha encontrado un descontento ciudadano generalizado por la calidad del servicio recibido en las instituciones públicas, desde la perspectiva tiempo de demora del trámite, procedimientos engorrosos, limitadas soluciones, mala conducta del servidor que presta el servicio, poca o nula claridad de los procedimientos a llevar por parte de la entidad, desidia, etc., creando una cultura que identifica a los servicios públicos como ineficientes, por ende en contra de los intereses de todos del Estado y sus gobernados.
Por ende, las tendencias actuales en la gestión pública, con el fin de buscar una solución factible a los problemas de percepción es intrínsecamente necesario establecer en las entidades públicas, un Gobierno Abierto, un nuevo modelo de gobernanza que busca restablecer la legitimidad y confianza de la ciudadanía en la gestión pública, permitiendo involucrar a los ciudadanos en los asuntos públicos, con el fin de aprovechar el uso de las nuevas tecnologías de la información y comunicación para mejorar la transparencia, tramitología y calidad del servicio con una gestión más eficaz y responsable. Todas las entidades estatales pueden generar acorde a sus propias dinámicas, Gobiernos Abiertos, con el objetivo de lograr mayor gobernabilidad, en donde todos los procesos que ejecute, se transformen de acciones administrativas a acciones de alta receptividad ciudadana, por ende, sus resultados serán el incremento de la percepción en la satisfacción de los usuarios, que fortalezcan el accionar institucional dotándoles de mayor confianza ciudadana. (O)