Reforma gerencial

Gustavo Ortiz Hidalgo

Las mejores respuestas a los desafíos económicos, sociales y políticos de América Latina se centran alrededor de la necesidad de impulsar una Reforma Gerencial de la administración pública, que pasa por instaurar un servicio público profesional y meritocrático. El CLAD (Consejo Latinoamericano de Administración para el Desarrollo) señala que ningún país de América Latina completó la construcción del modelo burocrático weberiano (Max Weber) en los moldes de las naciones desarrolladas, y, que concretar la reforma gerencial del Estado en la región es un desafío significativamente más grande que hacerlo en Europa o en los Estados Unidos.

En el contexto de la eficiencia, democratización del servicio público y flexibilización organizacional, la «Reforma gerencial» tiene como fundamento la profesionalización de la administración pública que ejerce funciones en el núcleo de actividades centrales del Estado. En dicho sector es fundamental la existencia de servidores públicos calificados y desarrollados profesionalmente, bien remunerados y motivados. Organismos como el CLAD plantean que la reconstrucción de la administración pública, a través de la «Reforma gerencial», llevará al mejoramiento de la gestión del Estado, entendida como la capacidad del mismo para concretar en la realidad, de forma eficiente y efectiva, las decisiones tomadas a nivel político.

Para alcanzar una sólida capacidad de gestión de gobierno es preciso contar con un Estado sano en el ámbito fiscal-financiero y competente en al ámbito administrativo. Solo adquiriendo mayor capacidad de gobierno será que los aparatos estatales favorecerán las tres grandes preocupaciones latinoamericanas, que vale la pena precisarlas: consolidación de la democracia, desarrollo económico y mejoramiento en la distribución de la riqueza. Tarea difícil pero imprescindible. (O)