Esta enfermedad hace que alrededor de 20 millones de personas en todo el mundo requieran tratamiento quirúrgico anualmente.
¿Qué es una hernia del abdomen?
La palabra hernia significa vástago o yema y es un abultamiento ya sea en la ingle o en cualquier parte del abdomen en donde se haya realizado una cirugía o en ciertos lugares proclives a padecerla, debido al aumento de la presión dentro del abdomen, especialmente debido a una alteración en la estructura de los tejidos de los pacientes, que los hacen susceptibles de padecerla. Dicha protrusión involucra muchas veces grasa o elementos del abdomen con son los intestinos u otros órganos como la vejiga.
No es una enfermedad nueva, su conocimiento viene desde el nacimiento de la historia del ser humano así como su tratamiento, que incluía artificios, brebajes, invocaciones, o procedimientos mutilantes y devastadores con el fin de aliviar sus manifestaciones.
Se puede presentar en diferentes localizaciones en el abdomen, a nivel de la ingle, del ombligo, sobre el ombligo, en la espalda o dentro del abdomen (hernia interna), así como alrededor de heridas abdominales de cirugías pasadas
¿Cuáles son los síntomas de esta enfermedad?
El síntoma principal es un abultamiento que aparece insidiosamente en los lugares antes mencionados, se presenta especialmente luego de algún esfuerzo físico (levantamiento de peso, estreñimiento tos excesiva) y que desaparece con el reposo, a ello se suma el dolor y la sensación de incomodidad. Dichos síntomas pueden tornarse más intensos y el dolor puede hacerse permanente, incluso incapacitante, el abultamiento ser más evidente y no desaparecer y por el contrario, acompañarse de distensión del abdomen, vómitos o incapacidad para las eliminaciones fisiológicas, además puede aparecer fiebre y compromiso del estado de salud del paciente, estos síntomas llevan al paciente en un estado de gravedad que, si se presentan, se necesita de un manejo emergente, pues indican complicaciones generadas de este padecimiento.
¿Cómo se diagnostica una hernia abdominal?
El diagnóstico puede ser realizado clínicamente, es decir, se desprende de un examen físico minucioso en el que el médico cirujano determina la presencia, tamaño, características y localización de una hernia. Existen ciertas circunstancias en la que no es posible realizar un diagnóstico basado solamente en la examinación del paciente y se recurre a estudios de imagen, especialmente la ecografía y la tomografía que nos ayudan a determinar con más exactitud dicho padecimiento. Dichos estudios se realizan en pacientes obesos, con síntomas inespecíficos, en pacientes de edades extremas, entre otros.
¿Cuál es su causa?
Esta enfermedad hace que alrededor de 20 millones de personas en todo el mundo requieran tratamiento quirúrgico anualmente, los datos estadísticos reflejan que entre un 15 a 20% de las personas la padecerán en algún momento de su vida, por ello su importancia.
Su causa ha sido estudiada ampliamente y se ha encontrado muy relacionada con una alteración en la composición de los tejidos de las personas especialmente con una alteración de la proteína que proporciona la resistencia de los tejidos del abdomen (el colágeno). Pero a esto se suman factores de riesgo importantes para su aparición como son la herencia, el género masculino, la edad (alrededor de los 5 años y entre los 70 y 80 años), la obesidad, la raza blanca o mestiza, el estreñimiento crónico, el cigarrillo, etc.
Es especialmente manifiesta en personas que realizan esfuerzo físico, es decir que se presenta en las etapas productivas de la vida y se presenta con mayor frecuencia en los hombres.
¿Puedo prevenir la formación de una hernia?
Debido a que la causa de dicha enfermedad apunta a un problema de la formación y de las características intrínsecas de los tejidos de cada individuo, es difícil para los pacientes prevenir su aparición, sin embargo se pueden tomar ciertas medidas que incidan en la reducción de los factores de riesgos modificables para el paciente como son evitar el tabaquismo, evitar el sobrepeso o el estreñimiento y llevar una alimentación sana sin realizar esfuerzos físicos importantes que provoquen un aumento de la presión abdominal.
Por otra parte, sin embargo para las hernias que se presentan luego de las cirugías, la prevención no está a cargo del paciente sino del profesional médico, es este caso del cirujano, quien realiza una intervención quirúrgica, pues las medidas de prevención están encaminadas a la implementación de pautas y procedimientos necesarios para disminuir el riesgo de formación de una hernia luego de una cirugía.
¿Cuándo se tratan las hernias?
El tratamiento de un paciente que tenga una hernia se establece luego de la valoración por el cirujano especialista en hernias, depende de muchos factores entre los que se incluyen el tamaño, la edad, la localización y de su sintomatología y del riesgo de que dicha hernia represente para su salud. Se intenta mantener en vigilancia estricta por parte del cirujano a los pacientes que tengan hernias que no causen síntomas y así evitar la cirugía, sin embargo cuando un paciente que padece una hernia del abdomen empieza a tener síntomas o el tamaño de la hernia es considerable, probablemente el tratamiento indicado es la cirugía, que va encaminada a prevenir las posibles complicaciones, potencialmente graves, de dicha enfermedad.
¿Cuál es la mejor manera de tratar una hernia?
Con el advenimiento de la cirugía moderna, el tratamiento de las hernias del abdomen ha cambiado de una manera acelerada, existen en la actualidad, disponibles mejores materiales y equipos tecnológicos que se utilizan en el tratamiento de las hernias.
Cuando está indicado el tratamiento, el único procedimiento efectivo para tratar las hernias es la cirugía. Este procedimiento se lo realiza, en la mayoría de las ocasiones, empleando materiales especiales denominados mallas, que no son otra cosa que láminas de material sintético, que se emplean para cerrar sin tensión los orificios por donde protruyen los órganos abdominales. Dicha cirugía se la puede realizar de dos maneras: Mediante una incisión o corte a nivel del abultamiento o mediante cirugía de mínima invasión como la cirugía laparoscópica, que tiene la ventaja de mejorar estéticamente las incisiones y además el retorno más rápido a las actividades cotidianas, de todas maneras el cirujano especialista en hernias es el indicado para valorar el caso y ofrecer al paciente la mejor alternativa para cada paciente en particular.
La cirugía es un procedimiento que, dependiendo de la técnica elegida, necesita anestesia regional (raquídea o peridural) o anestesia general. Dicho procedimiento se lo realiza en alrededor de una hora y media y el paciente puede regresar a su domicilio el mismo día de su ingreso en el hospital o al día siguiente, y retomar sus actividades cotidianas dentro de una semana.
Existen otro tipo de hernias, que son las denominadas hernias incisionales, que son las que se presentan luego de cirugías mayores como las que se dan en el caso de peritonitis o por extracción de tumores u órganos enfermos, en los que aparecen hernias con implicaciones particulares que, ya sea por su localización, por su tamaño o por el daño de la piel del abdomen, necesitan de un manejo especializado, en conjunto con especialistas en otras ramas e inclusive con el apoyo de dos cirujanos para abordar de la mejor manera el caso y procurar el mejor resultado para el paciente. Es importante que el paciente acuda a un centro quirúrgico especializado, con cirujanos de experiencia y que las condiciones tanto técnicas como tecnológicas, sean las adecuadas para el paciente.
¿Cuáles son las complicaciones luego de la cirugía¿
El riesgo de complicaciones ante cualquier tipo de procedimiento quirúrgico es inherente al mismo, pues, el acto de realizar una incisión y someter a un paciente a un trauma quirúrgico, trae consigo efectos hacia el enfermo, afortunadamente para el procedimiento de reparación herniaria los riesgos de complicaciones son muy bajos, dentro de ellos, se puede presentar hematomas o infecciones de la piel. Además existe riesgo de que nuevamente aparezca una hernia o que el paciente presente dolor crónico luego de la cirugía, riesgos que se presentan en rangos del 1 al 10%. (I)
Tome nota
Con el advenimiento de la cirugía moderna, el tratamiento de las hernias del abdomen ha cambiado de una manera acelerada.