Demolerán y reconstruirán fachada del templo de Nambacola del cantón Gonzanamá

Estado. Una cinta amarilla fue ubicada en el lugar por dónde están los escombros para advertir a la comunidad.
Estado. Una cinta amarilla fue ubicada en el lugar por dónde están los escombros para advertir a la comunidad.

Es el ofrecimiento que se realizó ayer, sin la presencia del Vicepresidente de la República.

Gonzanamá. Con mucha expectativa se encontraban en la tarde de ayer los moradores de la parroquia Nambacola del cantón Gonzanama, ya que se preveía la llegada del vicepresidente de la República, Otto Sonnelhozner, hecho que no ocurrió.

Cuando se informó que no llegaba, la mayoría esperó al gobernador de Loja, Eduardo Jaramillo y más autoridades provinciales que acudieron. Jaramillo afirmó que debido al clima de Catamayo no permitía el aterrizaje del avión por lo que se suspendió la visita.

Mientras eso ocurría unos 20 uniformados del Ejército Ecuatoriano que estaban en el lugar subieron a un vehículo militar y se retiraron del sitio.

Demolición

Luego de una pequeña reunión que mantuvieron entre las autoridades en el Centro de formación pastoral y catequesis, el gobernador informó que van realizar la demolición de la fachada de la iglesia de la parroquia, misma que fue afectada con el sismo que se registró la madrugada del domingo, para construir una nueva con similares características ya que es considerada patrimonio cultural.

“Los técnicos hicieron las valoraciones y lo que quedamos en este primer momento es que el Municipio va ayudar a apuntalar la fachada, pero lamentablemente tendrá que ser demolida ya que no aguantaría una remodelación”, refirió.

Adujo que el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) y el Municipio de Gonzanamá y el Gobierno Nacional trabajarán en el diseño.

El presupuesto sería de alrededor de 110 mil dólares, por lo que van a unir esfuerzos entre el Municipio, Diócesis de Loja, Gobierno Nacional y la comunidad que apoyará con mano de obra.

Iovanna Jaramillo, directora Zonal del INPC, expresó que van a considerar las características del inmueble y las necesidades de la localidad, “brindaremos apoyo con el asesoramiento técnico respectivo”, afirmó.

La vicealcaldesa de Gonzanamá, Beatriz Galván Herrera, alegó que el pueblo es muy unido por lo que estarán pendientes para apoyar y estar vigilantes de los trabajos. Adicionó que conocieron que dos viviendas del barrio El Portete tienen fisuras, mismas que no son muy grandes pero que solicitaron a los técnicos que verifiquen el estado en el que se encuentran.

LA CIFRA

110 MIL DÓLARES Costaría el arreglo de la fachada y el campanario.

La afectación es en la fachada reconstruida

Este templo se construyó en 1915, luego de tumbar una iglesia que era de madera. La edificaron de adobe con bareque y el techo con madera y teja. La comunidad aportó con algunas adecuaciones.

Hace unos 30 años fue reconstruida la fachada y es lo que se afectó nuevamente y será lo que van a intervenir.

El estruendo se escuchó a más de un kilómetro

El párroco de Nambacola, Jesús Redentor Bustos, contó que minutos antes del terremoto bajó a verificar si no había personas durmiendo en las inmediaciones del templo, “me quedé en medio escalón y en mi presencia se cayó la torre y luego el campanario”, expresó.

Destacó que afortunadamente no hubo personas afectadas y dijo que las ceremonias se celebrarán en el Centro de formación pastoral y catequesis, hasta que se reconstruya el templo.

Mercy Matailo Pinta, quien llegó al lugar comentó que se dieron cuenta que se cayó el campanario “por el estruendo, fue muy fuerte ya que vivo a un kilómetro de aquí y se escuchó clarito”, sostuvo.