Los reclamos de la ciudadanía se dan desde el pasado lunes. Municipio expone razones.
Las quejas de la ciudadanía no se hicieron esperar. Desde el lunes empezaron los reclamos por la escasez del líquido vital, principalmente en la zona oriental de la ciudad de Loja.
Las razones de la falta de agua en unos casos y la baja presión en otros, las expuso el director de la Unidad Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Loja (Umapal), Rafael González González, quien explicó que estos problemas se derivan de la incesante lluvia que soporta la localidad, por lo cual el agua cruda, que llega a la planta de Pucará, presenta un alto índice de turbiedad. En pocas palabras el agua, antes de llegar a la planta, prácticamente estaba enlodada.
“Si seguíamos con esa agua entrando a los filtros y al sedimentador, lo que hubiera pasado es que colapse la planta y eso ya no eran horas, sino días para arreglar”, detalló el funcionario, aclarando que se suspendió el tratamiento del agua por unas horas, hasta que baje la turbiedad. Por ello las reservas se quedaron sin agua.
Adicional a esto, la conducción de agua potable que llega desde Carigán e ingresa a la planta de Pucará también sufrió un daño, aunque el arreglo de la tubería se lo hizo en aproximadamente tres horas.
Solución
Rafael González recalcó que esto es un tema de la naturaleza y pidió comprensión a la ciudadanía porque no es cuestión de llenar las reservas y abrir las válvulas para que el agua llegue a los domicilios.
Son miles de metros de tubería, los mismos que deben llenarse, esto con las precauciones necesarias, porque caso contrario pueden generarse más daños.
González, además, sostuvo que, si bien los niveles de turbiedad son manejables, aún el tratamiento es complicado y es necesario comprender este tipo de situaciones.
EL DATO
El agua cruda en verano tiene un índice de turbiedad de 3 ó 4 NTU (Unidades Nefelométricas de Turbidez); en un invierno regular llega a 100 ó 200 NTU; pero en Loja, en estos días, alcanzó 1.100 NTU.