Escenario político

Santiago Armijos Valdivieso

Luego de algo más de dos años de ejercicio del poder, el gobierno de Lenín Moreno experimenta un importante desgaste político a pesar de haber impulsado y alcanzado temas trascendentales para la reinstitucionalización del país, seriamente afectada en la última década. Precisamente aquello que ha sido su mayor logro le ha generado furibundas reacciones por sus excoidearios de la bandera verde flex, quienes expulsados del paraíso del poder y marginados de las mieles del gobierno, siguen intentando por todos los medios posibles quitárselo de encima y así saciar su sed de venganza. Sin embargo esto está muy lejos de suceder dado que con el pasar de los días, los terribles pecados correístas se agravan y con ello el cínico discurso de que antes estuvimos mejor se cae por su propio peso.

En esa perspectiva, y aunque falta algún tiempo para las elecciones presidenciales, cabe preguntarnos, ¿cuál sería el mejor escenario político para el Ecuador?

En primer lugar, que todos los sectores políticos identificados con la reinstitucionalización del país se enfrenten a las acciones desestabilizadoras que pretendan retornar a la fracasada década pasada y que intenten afectar al convaleciente rumbo social, económico y democrático, que de alguna manera está tomado el país. Entiéndase por aquello, los esperanzadores avances alcanzados en materia de independencia de ciertas instituciones como por ejemplo la designación de la valiente Fiscal General; la revisión de políticas para incentivar la inversión privada interna y externa; o las posiciones diplomáticas adoptadas y alineadas al mundo libre como la condena a la despiadada dictadura venezolana.

En segundo lugar, que los partidos y movimientos políticos serios, asuman, evitando cometer los graves errores del pasado, el difícil reto de preparar responsablemente sus mejores cuadros de candidatos y estructurar planes de trabajo gubernamentales de largo aliento, que permitan al Ecuador salir de la rueda del show, del populismo y de la irresponsabilidad. (O)