30 años de pujanza

César Sandoya Valdiviezo

Pindal celebró 30 años de independencia política-administrativa. Probablemente se trate de uno de los cantones de mayor desarrollo que experimenta el suroccidente de la provincia de Loja.

De las calles polvorientas, del pueblo tranquilo, de las viviendas de adobe con techo de teja, de las acémilas caminando por el centro del poblado y de la agricultura incipiente solo quedan recuerdos. Ahora Pindal es un próspero cantón que cuenta con vías asfaltadas, modernos edificios, vehículos de todas las marcas y colores, y un comercio incesante que no para, sobre todo los fines de semana.

Ahora Pindal se proyecta hacia la gran ciudad, su ubicación geográfica es privilegiada. Es el centro de distribución de tráfico hacia cuatro destinos diferentes: la ciudad de Loja, La Costa, Perú y hacia Mangahurco, sitio donde se produce anualmente el fenómeno natural del florecimiento de los guayacanes.

Su clima espectacular lo ha beneficiado para que cada semana visiten personas de diferentes cantones de las provincias de Loja y El Oro, así como del norte de Perú, para conocer sitios emblemáticos como las Piscinas Naturales, laguna La Encantada, río San José, entre otros. Los Carnavales de Pindal se han posicionado como uno de los mejores de la provincia, de ahí que el Gobierno Local organiza cada año tres días de programa festivo que cuenta con un promedio de 5 mil turistas.

La gastronomía es otro imán que atrae turistas. Platos como arroz con salchicha, café con humitas, chanfaina, repe, sango, seco de gallina criolla, seco de pato, seco de chivo y una variedad de platos elaborados con mariscos son la principal atracción.

Se calcula que semanalmente salen de Pindal alrededor de 50 mil quintales hacia mercados de Guayaquil, la parte alta de El Oro, Cuenca, Santo Domingo, Ambato y Quito. La demanda es alta por los empresarios nacionales debido a la calidad del grano.

Se calcula que en Pindal se siembran unas 15 mil hectáreas y se cosecha un promedio de 120 a 150 quintales por hectárea, lo que significa que 2 millones de quintales se comercializan de forma anual. Esta es la principal actividad que mueve la economía local y genera importantes fuentes de trabajo, incluso ahora hasta para extranjeros. (O)