Mi querido Campus

Conozco un lugar de estudios superiores donde los graduados de hace 20 años aún visitan a sus ex-profesores, llaman y escriben directamente a las autoridades, y le cuentan al ex pro-rector sobre novedades de su vida y su familia. Un Campus que ha quedado en el corazón y buen recuerdo de todos quienes ahí nos hemos formado, porque a viva voz podemos decir “gracias”, lo que aprendimos nos dio la capacidad de destacar en lo profesional, y ser responsables como personas. Al final del camino, esto último marca en gran manera lo que cosechemos en nuestra vida. Me refiero al Campus Guayaquil de la USM, donde a partir de este año, también funciona el Campus José Antón Díaz de la Universidad Del Río – UDR. Quiero felicitar a la primera generación de estudiantes de la UDR que han elegido la alta exigencia académica por sobre la comodidad de la cercanía de casa y tantos otros “enganches” comerciales que alejan a los jóvenes del verdadero desafío que es la formación universitaria.

Paula Pettinelli
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