¿Puede la cirugía ser una solución para la diabetes?

Cuidados. El diabético, a medida que su enfermedad progresa, gasta el páncreas.
Cuidados. El diabético, a medida que su enfermedad progresa, gasta el páncreas.

La más utilizada y con efecto más duradero para el control de la diabetes es el Bypass Gástrico.

Se conocen como Cirugía Metabólica a las operaciones que se realizan sobre el tubo digestivo con el objetivo de conseguir la mejoría o remisión de la Diabetes tipo II y la reducción del riesgo cardiometabólico.

Existen diversos tipos de Cirugía Metabólica, la más utilizada y con efecto más duradero para el control de la diabetes es el Bypass Gástrico. Esta cirugía la realizamos de manera mínimamente invasiva (a través de cirugía laparoscópica) lo que permite una recuperación rápida y una pronta reactivación laboral.

Con mucha frecuencia, la obesidad está asociada a la diabetes.

La principal indicación de cirugía sería en pacientes diabéticos con obesidad moderada y severa; con más razón si la Diabetes o sus enfermedades asociadas son difíciles de controlar con cambios en el estilo de vida y tratamiento farmacológico.

Aunque no recomendamos de manera indiscriminada la cirugía metabólica en la Diabetes con Obesidad leve (IMC entre 30 y 35), se puede plantear su aplicación en ciertas situaciones, como por ejemplo si la diabetes es de difícil control con medicamentos o presenta comorbilidades.

Los foros de expertos a nivel mundial recomiendan la incorporación progresiva y racional de la cirugía metabólica como un tratamiento alternativo eficaz en los algoritmos de tratamiento escalonado de la Diabetes tipo 2.

No hablamos de Curar la diabetes, pues ésta es una enfermedad que no se cura, pero sí se logra una remisión (dejar de tomar medicamentos para la diabetes o dejar de usar insulina) por muchos años. Esto constituye un efecto muy favorable para el organismo, pues durante muchos años el paciente deja de ser diabético, disminuyendo notablemente o retrasando el riesgo de afectación de otros órganos vitales como corazón, hígado o riñones.

Insistimos, la cirugía metabólica no cura la diabetes, pero ha demostrado ser superior al tratamiento médico cuando ambas terapias han sido comparadas.

La respuesta

Entonces, ante la pregunta ¿Es la cirugía una buena opción para el tratamiento de la diabetes?

Indudablemente la respuesta es Sí. La Asociación Americana para la Diabetes (ADA), en sus últimas guías para el manejo de esta enfermedad recomienda “operar a los pacientes diabéticos que padecen de obesidad severa y a los obesos moderados que no logran un control adecuado con tratamiento médico”; y “considerar como una buena opción a las personas con obesidad moderada y a aquellos con obesidad leve que no logran un buen control de sus niveles de glucosa pese a un tratamiento intensivo”.

El diabético, a medida que su enfermedad progresa, gasta el páncreas. Con la cirugía, el factor incretina aumenta y las hormonas comienzan a estimular la secreción pancreática de insulina y la diabetes se resuelve. Ello, funciona en personas que tienen “reserva pancreática”, es decir, que no han gastado el páncreas. En este sentido, tienen mejor respuesta aquellos pacientes con menos años de evolución de la enfermedad que aquellos que tienen quince años de diabetes.

Antes de indicar una cirugía analizamos cuidadosamente detalles como la edad del paciente, su grado de Obesidad, enfermedades asociadas, y se realizan estudios para evaluar su estado cardiocirculatorio, respiratorio, digestivo y su reserva pancreática.

En el Hospital Clínica San Agustín realizamos Cirugía bariátrica y metabólica desde hace muchos años, lo que nos permite afirmar que contamos con experiencia en este tipo de procedimientos.

Los diferentes foros científicos concluyen que la cirugía tiene un beneficio real en la vida del enfermo diabético y en la evolución de esta enfermedad; es indispensable estudiar cada caso para decidir, qué pacientes son candidatos y qué pacientes no lo son.

Finalmente, consideramos importante que el Médico Diabetólogo participe en conjunto con el cirujano en la selección del paciente adecuado para cirugía y el momento oportuno para realizar el procedimiento, además de realizar el seguimiento a largo plazo del paciente post cirugía metabólica.