Los cuatro ciudadanos que con arma de fuego roban en Cariamanga están con prisión preventiva

Proceso. En el vehículo se movilizaban los asaltantes.
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Proceso. En el vehículo se movilizaban los asaltantes.
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Proceso. En el vehículo se movilizaban los asaltantes.
Proceso. En el vehículo se movilizaban los asaltantes.

El faro roto de la camioneta delata a la banda que roba en el cantón Calvas.

Están tras las rejas y a Jeiser G. A., Júnior D. R., Luis S. Q. y Yandri M. R. el fiscal de Loja, con sede en Calvas, Hugo Fernando Eras, los acusó del presunto delito de robo y las pruebas que él presentó durante la audiencia de calificación de flagrancia y formulación de cargos fueron contundentes.

Jeiser G. A. y Júnior D. R., de origen venezolano, ingresaron a un local comercial de la ciudad de Cariamanga, capital del cantón Calvas, la tarde del último miércoles y con pistola en mano robaron tres teléfonos celulares y un cuarto a una adolescente a quien encontraron por la calle.

Los dos venezolanos fueron recogidos, luego de robar los cuatro teléfonos celulares, en una camioneta gris, marca Chevrolet, modelo Dmax, de placa de la provincia de Pichincha (P), en la cual se transportaban Luis S. Q. y Yandri M. R., quien se hizo pasar por José (su hermano).

Cooperación eficiente

El fiscal Eras destaca la valentía de los moradores del sector en donde se cometió el delito porque ellos comunicaron al 911 lo sucedido y es el Centro Operativo Local quien alerta a la Policía lo que pasaba y son ellos los que piden se rastreen los números de los teléfonos celulares para ubicar a los pillos.

«Fueron localizados, a través de los teléfonos celulares, a la altura de la parroquia Colaisaca, por la vía que conduce de Cariamanga al cantón Macará. En ese momento inicia la persecución», comenta el fiscal Eras, quien indica que la persecución fue hasta el puente militar de Sabiango, en Macará.

El fiscal Eras indica que hubo dos pistas para reconocer la camioneta: el faro posterior izquierdo quemado y las dos primeras letras de la placa del vehículo que se ven en los vídeos de vigilancia del lugar en donde se cometió el presunto delito; además, los perjudicados reconocieron a los ciudadanos.

EL DATO

Uno de los dos ecuatorianos fue sentenciado por un delito de tráfico ilegal de drogas.

El faro roto de la camioneta delata a la banda que roba en el cantón Calvas.

Están tras las rejas y a Jeiser G. A., Júnior D. R., Luis S. Q. y Yandri M. R. el fiscal de Loja, con sede en Calvas, Hugo Fernando Eras, los acusó del presunto delito de robo y las pruebas que él presentó durante la audiencia de calificación de flagrancia y formulación de cargos fueron contundentes.

Jeiser G. A. y Júnior D. R., de origen venezolano, ingresaron a un local comercial de la ciudad de Cariamanga, capital del cantón Calvas, la tarde del último miércoles y con pistola en mano robaron tres teléfonos celulares y un cuarto a una adolescente a quien encontraron por la calle.

Los dos venezolanos fueron recogidos, luego de robar los cuatro teléfonos celulares, en una camioneta gris, marca Chevrolet, modelo Dmax, de placa de la provincia de Pichincha (P), en la cual se transportaban Luis S. Q. y Yandri M. R., quien se hizo pasar por José (su hermano).

Cooperación eficiente

El fiscal Eras destaca la valentía de los moradores del sector en donde se cometió el delito porque ellos comunicaron al 911 lo sucedido y es el Centro Operativo Local quien alerta a la Policía lo que pasaba y son ellos los que piden se rastreen los números de los teléfonos celulares para ubicar a los pillos.

«Fueron localizados, a través de los teléfonos celulares, a la altura de la parroquia Colaisaca, por la vía que conduce de Cariamanga al cantón Macará. En ese momento inicia la persecución», comenta el fiscal Eras, quien indica que la persecución fue hasta el puente militar de Sabiango, en Macará.

El fiscal Eras indica que hubo dos pistas para reconocer la camioneta: el faro posterior izquierdo quemado y las dos primeras letras de la placa del vehículo que se ven en los vídeos de vigilancia del lugar en donde se cometió el presunto delito; además, los perjudicados reconocieron a los ciudadanos.

EL DATO

Uno de los dos ecuatorianos fue sentenciado por un delito de tráfico ilegal de drogas.

El faro roto de la camioneta delata a la banda que roba en el cantón Calvas.

Están tras las rejas y a Jeiser G. A., Júnior D. R., Luis S. Q. y Yandri M. R. el fiscal de Loja, con sede en Calvas, Hugo Fernando Eras, los acusó del presunto delito de robo y las pruebas que él presentó durante la audiencia de calificación de flagrancia y formulación de cargos fueron contundentes.

Jeiser G. A. y Júnior D. R., de origen venezolano, ingresaron a un local comercial de la ciudad de Cariamanga, capital del cantón Calvas, la tarde del último miércoles y con pistola en mano robaron tres teléfonos celulares y un cuarto a una adolescente a quien encontraron por la calle.

Los dos venezolanos fueron recogidos, luego de robar los cuatro teléfonos celulares, en una camioneta gris, marca Chevrolet, modelo Dmax, de placa de la provincia de Pichincha (P), en la cual se transportaban Luis S. Q. y Yandri M. R., quien se hizo pasar por José (su hermano).

Cooperación eficiente

El fiscal Eras destaca la valentía de los moradores del sector en donde se cometió el delito porque ellos comunicaron al 911 lo sucedido y es el Centro Operativo Local quien alerta a la Policía lo que pasaba y son ellos los que piden se rastreen los números de los teléfonos celulares para ubicar a los pillos.

«Fueron localizados, a través de los teléfonos celulares, a la altura de la parroquia Colaisaca, por la vía que conduce de Cariamanga al cantón Macará. En ese momento inicia la persecución», comenta el fiscal Eras, quien indica que la persecución fue hasta el puente militar de Sabiango, en Macará.

El fiscal Eras indica que hubo dos pistas para reconocer la camioneta: el faro posterior izquierdo quemado y las dos primeras letras de la placa del vehículo que se ven en los vídeos de vigilancia del lugar en donde se cometió el presunto delito; además, los perjudicados reconocieron a los ciudadanos.

EL DATO

Uno de los dos ecuatorianos fue sentenciado por un delito de tráfico ilegal de drogas.

El faro roto de la camioneta delata a la banda que roba en el cantón Calvas.

Están tras las rejas y a Jeiser G. A., Júnior D. R., Luis S. Q. y Yandri M. R. el fiscal de Loja, con sede en Calvas, Hugo Fernando Eras, los acusó del presunto delito de robo y las pruebas que él presentó durante la audiencia de calificación de flagrancia y formulación de cargos fueron contundentes.

Jeiser G. A. y Júnior D. R., de origen venezolano, ingresaron a un local comercial de la ciudad de Cariamanga, capital del cantón Calvas, la tarde del último miércoles y con pistola en mano robaron tres teléfonos celulares y un cuarto a una adolescente a quien encontraron por la calle.

Los dos venezolanos fueron recogidos, luego de robar los cuatro teléfonos celulares, en una camioneta gris, marca Chevrolet, modelo Dmax, de placa de la provincia de Pichincha (P), en la cual se transportaban Luis S. Q. y Yandri M. R., quien se hizo pasar por José (su hermano).

Cooperación eficiente

El fiscal Eras destaca la valentía de los moradores del sector en donde se cometió el delito porque ellos comunicaron al 911 lo sucedido y es el Centro Operativo Local quien alerta a la Policía lo que pasaba y son ellos los que piden se rastreen los números de los teléfonos celulares para ubicar a los pillos.

«Fueron localizados, a través de los teléfonos celulares, a la altura de la parroquia Colaisaca, por la vía que conduce de Cariamanga al cantón Macará. En ese momento inicia la persecución», comenta el fiscal Eras, quien indica que la persecución fue hasta el puente militar de Sabiango, en Macará.

El fiscal Eras indica que hubo dos pistas para reconocer la camioneta: el faro posterior izquierdo quemado y las dos primeras letras de la placa del vehículo que se ven en los vídeos de vigilancia del lugar en donde se cometió el presunto delito; además, los perjudicados reconocieron a los ciudadanos.

EL DATO

Uno de los dos ecuatorianos fue sentenciado por un delito de tráfico ilegal de drogas.