Cada 13 de abril, los maestros ecuatorianos, celebran el día en el que se resalta a quienes a diario dedican su tiempo a compartir conocimientos con las nuevas generaciones, aunque en esta ocasión, ante la proliferación de coronavirus, su labor se cumple desde casa.
“Celebramos nuestro día, sin recibir aún el sueldo y cumpliendo nuestra labor a través de esta nueva modalidad, teletrabajo”, afirma el presidente de la Unión Nacional de Educadores, Gilbert Granda.
Al tiempo envía un abrazo sincero, fraterno y unionista a quienes integran la UNE, Núcleo Provincial de Loja. “Maestro es una de las profesiones más hermosas y dignas, pero no es un trabajo fácil, requiere de mucho esfuerzo, dedicación, compromiso y responsabilidad para poder educar”, expresa.
“Es deber de los gobernantes otorgar el puesto que se merecen los maestros, mejorando sus condiciones de trabajo y el nivel de vida de los verdaderos soldados de la Patria que diariamente libran una encarnizada batalla para derrotar a la ignorancia cruel y esclavizadora”, menciona Granda.
El educador asegura que sus armas más leales y nobles son la pedagogía, la didáctica y con el profesionalismo que les caracteriza.
El dolor y sufrimiento en la familia magisterial, dice, que es por los compañeros fallecidos, por los despedidos injustamente, por el no pago puntual de sus sueldos, por la irresponsable actitud de las autoridades al disponer que los maestros acudan a los establecimientos educativos para hacer la entrega de la alimentación escolar, poniendo en riesgo sus vidas, la de sus familias y de la comunidad educativa.
Al final invita a los maestros a permanecer juntos y expresa la solidaridad con las familias que sufren el abandono de los gobernantes, al quedarse sin trabajo o bien que se encuentran sin tener dinero.
EL DATO
Lo hacen sin haber recibido, hasta el momento, el pago de su sueldo.