Martín Pallares dice que con su declaratoria de inocencia ganan todos los periodistas

CASO. Se llevó a cabo en el complejo judicial del norte de Quito.
CASO. Se llevó a cabo en el complejo judicial del norte de Quito.

El exmandatario lo había demandado por supuestas injurias. La audiencia estuvo matizada por enfrentamientos.

En una diminuta sala del Complejo Judicial Norte, en Quito, se llevó a cabo la audiencia por la presunta infracción de injurias en el proceso que el expresidente Rafael Correa siguió en contra del periodista Martín Pallares, del que Pallares resultó finalmente inocente.

Pese a que este tipo de actuaciones son públicas, no se permitió el ingreso de la prensa y los periodistas tuvieron que intentar escuchar los argumentos desde una sala de espera caracterizada por gritos y aplausos de los simpatizantes del exmandatario.

Conforme pasaron los minutos, llegaron también amigos del periodista y la tensión se exacerbó hasta el momento en que simpatizantes del expresidente agredieron al periodista Christian Zurita. En ese momento, ambos bandos se enfrentaron con gritos y empujones. Sin embargo, el gobernador de Esmeraldas, Gabriel Rivera, negaba la violencia de su bando y dijo: “Yo he sido agredido por estos señores que representan el pasado de la patria”. Los policías debieron intervenir. Además de estos ruidos, el audio de la transmisión en vivo, desde la sala de la audiencia, se cortó constantemente por su mala calidad.

En el interior, Pallares permanecía tranquilo junto a sus abogados, Juan Pablo Albán, Farith Simon, Juan Pablo Aguilar y Xavier Andrade. Correa no asistió. En la mesa de la acusación estaban únicamente su abogado, Caupolicán Ochoa, y su asistente.

Mientras por la pantalla se intentaba ver la audiencia, una mujer vestida de verde, visiblemente conmovida, tocó el rostro de Correa en un afiche, se santiguó y lloró. Cuando la defensa de Martín Pallares puso un video en el que aparecía el expresidente defendiendo a su exministro Alecksey Mosquera, implicado en el caso Odebrecht, una señora exclamó: “¡Por la sabatina nos conocen en el mundo, antes no sabían dónde era Ecuador!”.

Si bien las interrupciones fueron, principalmente, por parte de los simpatizantes de Correa, también hubo respuestas de los amigos de Pallares. Mientras los correístas gritaban: “Fuera prensa corrupta”, el otro bando decía: “Correa, amigo, Odebrecht está contigo”.

Argumentación

Ochoa afirmó que la publicación que hizo Pallares, en el portal 4Pelagatos, titulada ‘Si a Correa lo sorprenden robando podría decir que estaba cuidando’, incurría en injuria en contra del expresidente, ya que lo imagina en actitudes delictivas, como siendo detenido al salir de la casa de su vecino con las joyas en sus manos. El abogado de Pallares, Farith Simon, expresó que abrir un proceso por un relato abiertamente imaginario e inverosímil, constituye “un intento por criminalizar el pensamiento y la imaginación”.

Por Correa, compareció una única testigo, Magali Vera, que afirmó haber leído el artículo y, ante la pregunta de Juan Pablo Albán, manifestó que su opinión sobre el exmandatario no se vio alterada, por cuanto, para el jurista, se demostraba que la publicación no afectó el buen nombre del exmandatario.

Los defensores de Pallares señalaron que el pensamiento no delinque y que es el derecho de todo ciudadano hablar y reflexionar sobre el caso Odebrecht, al igual que Pallares, ya que su texto era una reacción ante la defensa que hizo Correa de su exministro Alecksey Mosquera, diciendo que el millón de dólares que recibió de la constructora brasileña era un acuerdo entre privados.

Los abogados de ambas partes tuvieron un encontronazo literario. Ante una cita de Albán del poeta español Antonio Machado, exiliado de la dictadura franquista, Caupolicán Ochoa intentó argüir que William Shakespeare, en su tiempo, condenaba este tipo de comportamientos, en relación a las injurias. Fue el momento en que el periodista Francisco ‘El Pájaro’ Febres Cordero, presente en la sala, se llevó indignado las manos a la cabeza.

Luego de escuchar los argumentos de ambos lados, el juez Fabricio Carrasco ratificó el estado de inocencia de Pallares. (MMD)

Reacción

Luego de conocer la ratificación de su inocencia, Pallares manifestó que los que salen ganando son los periodistas ante un acto de amedrentamiento que buscaba un mensaje de “no criticar a una autoridad pública” y, por el contrario, la sentencia permite a la ciudadanía en general “hablar del tema Odebrecht, sin miedo a indagar y sin la terrible sombra de la autocensura”.

LA CIFRA:

4
horas duró la audiencia de ayer.

EL DATO:
Este es el primer caso que el expresidente pierde luego de dejar el poder.