La inyectaron y murió

Relato. Los familiares de la occisa esperaron por su cuerpo en las afueras de la morgue de Quevedo.
Relato. Los familiares de la occisa esperaron por su cuerpo en las afueras de la morgue de Quevedo.

BUENA FE

Jessica Ganchozo, de 31 años de edad, falleció la madrugada de ayer luego de que sufriera una parálisis en todo su cuerpo, esto 24 horas después de que le colocaran una inyección para la gripe.

Guisella Ganchozo, sobrina de la víctima, explicó que todo ocurrió tan rápido ya que Jessica se había estado sintiendo mal de salud, por lo que buscó los servicios de un médico particular.

Sin embargo, horas después de que fue atendida, empezó a sentirse mucho peor. “La inyectaron y se le terminó durmiendo la parte derecha de su cuerpo”, relató Ganchozo.

Y es que aunque se encontraba mal de salud había pedido como siendo su último deseo, que la llevaran hasta el velorio de uno de sus hermanos por cumplir un año de fallecido.

“Ella nunca dejó de hablar y nos decía que lo único que le había hecho daño era la inyección que le habían colocado”, relató Ganchozo.

EL DATO
Según familiares de la fallecida, ya se habrían contactado con la doctora que la inyectó.Pero fue a las 23:00 del jueves cuando la mujer habría empezado a sentirse mal, por lo que la llevaron hasta una clínica particular donde a las 04:00 de ayer falleció.

Beatriz Ganchozo, otra sobrina de la ahora occisa, explicó que aún no saben qué harán judicialmente ya que esperan los resultados de la autopsia para determinar si se trató de alguna mala práctica médica.

La mujer deja tres hijos en la orfandad (9, 3 y 2 años de edad) y está siendo velada en la cooperativa Nogales Izurieta (en la entrada al Plato) del cantón Buena Fe. (MZA)