Adiós al sueño que pintaba bien

QUEVEDO

Un convenio entre el Ministerio de Educación y la fundación Edificar, sirvió para en 2017 traeran al país a unos 300 profesionales de diferentes países del mundo para impartir clases de inglés en instituciones públicas. El programa ofertado se llamaba ‘It’s time to teach’ (es tiempo de enseñar) y en él se apuntaron jóvenes de Venezuela, China, Tailandia, Nigeria, Canadá, entre otros.

Sin embargo, cuando ya estaban en el Ecuador, varias de las cláusulas del contrato no se habrían cumplido, una de ellas es que debían haber sacado su visa de trabajo con la ayuda de la fundación, situación que no se dio.

Además de la falta de pago por sus servicios, lo que ha ocasionado, según los perjudicados, que en la actualidad no tengan ni donde vivir.

Situación

Varios de estos profesionales que también son africanos vistaron las oficinas de Diario La Hora en Quevedo. Contaron que debido a que no manejan perfectamente el español ha sido dificil acudir a alguien para obtener ayuda.

Además contaron que tras pedir respuestas, lo único que saben es que el Ministerio de Educación transfirió los recursos a la fundación Edificar y allí quedó todo.

Diana Huerta, abogada y amiga de los profesionales, mencionó que como conocedora del idioma les ha venido brindado apoyo. “Hace un mes llamé a la persona encargada de la fundación y me dijeron que llame en una hora, cuando volví a llamar me dijeron que la persona encargada estaba ocupada y que no podía atenderme, y esas han sido las respuestas obtenidas”, dijo Huerta.

TOME NOTA
‘Ha ocurrido un error’. Ese es el mensaje que actualmente recibe el visitante en la página web del Ministerio de Educación cuando busca información sobre ‘It’s time to teach’.Agregó que a algunos de los profesores su visa se les ha expirado y están viviendo en los terminales terrestres.

Isaac Adjei, uno de los docentes que llegó del África, manifestó que en la actualidad no tienen ninguna comunicación formal por parte de la fundación, con quienes tienen firmado el contrato. “Somos profesionales y hemos venido a contribuir al país y no es justo que nos estén tratando de esta manera”, menciono Adjei.

El contrato que habrían firmado se cumpliría hasta marzo del año en curso. Y es que para el Ministerio de Educación el programa ‘It’s time to teach’ era el ideal, sobre todo desde que en 2014 se estableciera la obligatoriedad de la enseñanza de este idioma en todas las instituciones públicas del país y, generado el decreto, la entidad notara que les faltaban 3.000 docentes para llenar las vacantes.

EL DATO
El Estado notificó a 312 docentes extranjeros del cierre del programa de enseñanza en inglés. Se registraron irregularidades en el manejo de fondos.Sin embargo, durante los primeros tres días de 2018, los 300 maestros que habían llegado al país un año antes, recibieron un apresurado comunicado de fundación Edificar, la institución que dirigía el proyecto para el ministerio, de que iban a cerrar sus puertas. Hay quienes incluso no recibieron ningún mensaje. Al menos una decena no saben qué harán y cómo se sustentarán hasta que les lleguen los pasajes de retorno a sus países de origen que se emitirían hasta finales de mes. (MQL/RCL)