URDANETA.
Diego Alfredo Hernández, de 30 años de edad, se salvó de morir luego de un árbol cayó sobre la pared de su vivienda donde se encontraba durmiendo junto a tres de sus familiares.
Según la víctima, todo ocurrió a eso de las 04:00, lo que provocó que quedaran prácticamente sepultados. El fuerte ruido hizo que los moradores del recinto Los Cerritos salgan de sus viviendas a ver lo que había ocurrido.
Según Hernández, en medio de la desgracia una de sus piernas se le quedó atrapada con una rama pero su primer pensamiento fue para su hijo de un año y medio a quien que logró salvar. “De la noche a la mañana nos quedamos sin nada. Con mucho esfuerzo había ahorrado para construir mi casa y tener mis cositas porque la vida aquí en el campo es difícil. Ahora quedarme sin nada duele”, se quejó.
Ayuda
Al respecto, Leonidas Villamar, Jefe Político de Urdaneta, detalló que ya han hecho el informe de evaluación inicial para que se le haga la ayuda humanitaria de utensilios de cocina, vituallas y alimentación.
Además, buscan que el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), a través de un informe del Municipio, acuda para ayudar en el levantamiento de la vivienda o en la reposición de la misma, ya que está totalmente destruido.
Mientras que. Karen Zambrano, directora del Departamento de Gestión de Riesgo, explicó que la vivienda está totalmente inhabitable, por lo que la familia ha pasado a quedarse en casa de personas acogientes.
EL DATO
Un perro también había quedado atrapado entre las paredes de las viviendas y ayer en la mañana fue sacado por un equipo de rescate.
Según el informe técnico de Gestión de Riesgo, el suceso ocurrió por dos generadores de eventos: el tema de las lluvias y un árbol vetusto.
El hecho se originó cerca de las 04:00 de ayer en el recinto Los Cerritos, ubicado en el cantón Urdaneta.
El personal del Cuerpo de Bomberos hizo un llamado para que quienes tengan árboles cerca de sus casas los corten para evitar una desgracia similar. (MZA)
Salvaron pocas cosas
Leticia Ronquillo, de 18 años de edad, detalló que la casa de cemento la habían construido hace seis meses. Tras la desgracia de ayer solamente lograron salvar un televisor y una cocina.
“Me duele tanto el esfuerzo que hemos tenido. Hemos dejado de comprarnos cosas para nosotros por construir nuestro hogar. Uno nunca sabe lo que puede pasar”, detalló Ronquillo.
