Sicario cazó al ‘Pepudo’ en su local

Consternación. En la morgue de Ventanas los familiares del occiso pidieron que se investigue el caso.
Consternación. En la morgue de Ventanas los familiares del occiso pidieron que se investigue el caso.

URDANETA-VENTANAS

El desayuno que ayer en la mañana ingirieron los esposos Villamar-Aldáz fue el más amargo de sus vidas. Pues cuando se disponían tomar el café una llamada telefónica les notificó del asesinato de su hijo menor Jorge Gabriel.

Cuando llegaron hasta las calles Leónidas Icaza y Pinargote descubrieron que el hombre estaba herido de gravedad, ya que un motorizado le había propinado un tiro en el brazo izquierdo.

En medio de la multitud una ambulancia llegó para trasladarlos hasta Babahoyo pero en el camino murió. Cerca de las 10:00 el cuerpo fue ingresado a la morgue de Ventanas hasta donde llegaron sus familiares.

Desgracia

Cristhian Villamar contó que ayer como todos los días llegó con su hermano Jorge, de 41 años, hasta la carnicería pero cuando él hacía otras labores, vio que llegaron dos motorizados. Uno de ellos se bajó con el casco puesto y se acercó a la vitrina. En ese momento solo escuchó la detonación de un arma. “Cuando regresé a mirar a mi hermano lo vi malherido mientras que el asesino me miró y salió corriendo para embarcarse a una moto que lo esperaba fuera del local”, reveló Cristian.

Hecho. Villamar va a ser velado en el cantón Urdaneta. Aun no hay fecha para su sepelio.
Hecho. Villamar va a ser velado en el cantón Urdaneta. Aun no hay fecha para su sepelio.

Tras este suceso, contó que trató de seguir a los sujetos de su hermano pero por el susto se olvidó de las llaves de su moto por lo que regresó al local para auxiliarlo.

Otro de los hermanos de la víctima, Ricardo Villamar, dijo que conoce los nombres y apellidos de la persona que mandó a matar a su hermano y que espera que pronto la justicia brille.

“Por qué le hicieron esto. Cuánto vale la vida de un ser humano. No es justo que por 100 o 200 dólares maten a una persona. Han dejado a una familia destrozada”, dijo Villamar, en medio de un prolongado llanto.

La víctima era el menor de 5 hermanos y había llegado desde hace dos años al cantón Urdaneta donde se había puesto un cárnico. Estaba separado y tenía un hijo a quien el sábado recién le había celebrado su cumpleaños en Guayaquil.

Por el momento la Policía investiga el hecho de sangre aunque revelaron que ya tienen pistas de los asesinos debido a que en la zona donde ocurrió el hecho una cámara de video vigilancia lo grabó todo. (MZA)

Le dieron para matarlo

Para los familiares de Gabriel Villamar, a quien le decían ‘Pepudo’, sus victimarios llegaron con el fin de matarlo, ya que no le robaron nada en el local de carnes.

De acuerdo con la médico forense, Sonia Ayala, la bala que entró en el cuerpo de la víctima era explosiva, por lo que no le dio tiempo a nada.

La bala explosiva es un tipo de munición especial hecha con el polvo explosivo y la bala vacía. Estas balas explotan al impactar contra una superficie.