Linchados por supuesto secuestro de menores

La población del puerto pesquero artesanal hizo justicia por cuenta propia a tres presuntos raptores de menores.

Redacción POSORJA, GUAYAS

Dos hombres y una mujer fueron asesinados ayer por pobladores de Posorja, parroquia rural de Guayaquil, tras acusarlos de haber secuestrado a varios niños del sector.

El hecho ocurrió pasadas las 13:40, en el centro de la población, cuando el populacho interceptó el vehículo en el que se transportaban los ahora fallecidos y los pequeños que estaban siendo presuntamente plagiados.

Según un parte preliminar, los tres sujetos se movilizaban a bordo de un taxi, placas GB0-5875, por lo que los uniformados actuaron ante la denuncia de los secuestros ocurridos en sectores de la parroquia e inmediaciones de un plantel educativo.

Situación

A los tres los condujeron a la entidad y los recluyeron por un corto tiempo, pero fueron sacados del interior a la fuerza por el enardecido populacho.

La alarma movilizó a gran parte de la población que con piedras y palos, exigió a los dos hombres y a la mujer que estaban detenidos.

Los manifestantes los llevaron a la calle donde procedieron con la mortal tortura ante la vista de todos los transeúntes.

Después, los cuerpos golpeados brutalmente con objetos contundentes, fueron incinerados públicamente en frente de otros pobladores que nada pudieron hacer para evitar que los sospechosos sean ajusticiados. Los iracundos moradores voltearon el taxi y también le prendieron fuego y apedrearon el destacamento de la Policía, cuyos efectivos solo se limitaron a observar para salvaguardar su integridad física.

El descontrol siguió creciendo. La mayoría de pobladores cubría sus rostros con camisetas improvisadas como pasamontañas.

Posteriormente, hombres no identificados lanzaron botellas con gasolina contra la fachada del destacamento incluso alcanzado a un uniformado que pudo ser auxiliado; mientras un contingente de una base militar cercana avanzaba para detener a la muchedumbre.

Los militares acordonaron el área donde quedaron los cuerpos y dos motocicletas que fueron alcanzadas por las llamas del destacamento policial.

Miembros de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), ayudaron a desviar el tráfico de vehículos hacia otras calles, para evitar que estos también reciban pedradas y palos de las enardecidas personas que hicieron justicia por su cuenta y riesgo.

En medio de la calle principal de Posorja, se divisó una gran columna de humo producto de la quema del automotor. Así también a una gran cantidad de personas corriendo de un lugar a otro y gritando “!quémenlos ¡”… “!quémenlos ¡”.

Poco después del arribo de los efectivos de militares, la calma retornó entre los pobladores.

Los cuerpos de los ajusticiados quedaron sobre la calle bajo su propia sangre con muestras de quemaduras y los golpes que recibieron de la gente. (DAB)

Niño fallecido

Extraoficialmente se conoció que el menor que estaba siendo raptado por los sospechosos, habría fallecido en una casa de salud de la localidad debido a un aparente exceso de escopolamina.