¿Qué decisiones debe tomar el nuevo Concejo Municipal?

VOTO. El alcalde Jorge Domínguez asistió al colegio Nicolás Infante Díaz para ejercer su derecho al voto.
VOTO. El alcalde Jorge Domínguez asistió al colegio Nicolás Infante Díaz para ejercer su derecho al voto.

QUEVEDO

“Realizar una fiscalización objetiva de todos los frentes, de esa manera se conocerá cuáles son los correctivos que se deberían tomarse o enrumbar a un objetivo más elevado”, fue la recomendación de Eloy Mueckay, exalcalde de Quevedo (1984-1988) para esta nueva administración, que definitivamente representará un gran reto para los funcionarios y quevedeños.

Agregó que antes de tomar cualquier decisión en torno a la gestión municipal, habría que conocer bien al ‘jinete’. “Es como cuándo vas a conducir un vehículo, antes de seguir en marcha hay que introducir la llave”, dijo.

Acotó que el alcalde Jorge Domínguez como segunda instancia tiene que terminar las obras que aún están inconclusas como el Malecón Eloy Alfaro y el Mercado del Río. También opinó que aunque no estuvo intrínsecamente en la administración de Domínguez, considera que a simple vista faltó mayor socialización y planificación en relación a las obras civiles.

“En la vida hay que actuar con una visión: ‘hacia donde quiero llegar’. Cuando fui candidato apunté a una visión. No vi clara la visión del Alcalde, porque como ciudadano debería tenerlo claro hacia dónde nos ha querido llevar”, expresó.

Mueckay aconsejó firmar un convenio con la Prefectura para llegar a un acuerdo acerca de las obras que deberían hacerse en esta gestión y direccionó llevar a Quevedo a un objetivo turístico, como expropiarse de un parque recreacional o convertir a la Ruta del Río en una potencia económica. “Cada cambio de Alcalde son visiones diferentes. Depende de quién es el jinete del potro, porque el caballo anda al paso del jinete. En la carrera que va emprender, si tiene vallas se puede saltar esas vallas, o tiene que buscar un desvío”, finalizó.

Sin escándalos

Por su parte, Xavier Villacís, periodista y analista político, considera que la gestión de Jorge Domínguez ha estado llena de cuestionamientos en el ámbito político, situación que a decir él, debería cambiar en primera instancia. “Procurar una administración que deje los escándalos y luchas internas que terminan afectando a la ciudad”, mencionó.

Sin embargo, manifiesta que el camino a una Alcaldía “pasiva” está difícil de alcanzar, ya que la votación fue muy fraccionada y el Concejo podría dividirse. “Quevedo es una ciudad que necesita liderazgo, pero el liderazgo se lo gana a través de ejemplo”, enfatizó.

Villacís acotó potenciar una fiscalización para conocer los actos de corrupción que se hayan dado a través del manejo de los fondos públicos. “Ir al Municipio no es llegar a robar o hacerse rico, sino a servir a la colectividad. Dar ejemplo de que efectivamente se quiere una imagen positiva y de desarrollo tanto en lo social-moral y político-económico”, apuntó.

Dentro de los planes para mejorar la ciudad recomendó trabajar en los problemas que persisten desde las administraciones anteriores como el agua y la inseguridad. “Abrir las puertas del Municipio para que vayan los medios de comunicación y la colectividad, que sea un participación en conjunto con socializaciones con todos los sectores”, finalizó.

Más socialización

Algo similar opina la economista Luciana Coello, docente de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo (UTEQ), quien considera que la falta de una socialización con los involucrados en cada proyecto provocó que los resultados no sean proactivos.

“Se administró mal, llegaba dinero para tal proyecto y los desvirtuaban. Nunca se ofreció el soterramiento en campaña y lo llegó a hacer como si fuera una Ordenanza, jamás se convocó a los técnicos de la empresa eléctrica, y ese fue un dinero tirado a la basura”, dijo.

Otra situación que debería cambiar, según la economista, es la edificación de obras sin pensar en el financiamiento, ella nombró la remodelación del Malecón Eloy Alfaro, las bahías y el proyecto del agua potable. “Todos sabemos que hay austeridad en el país, que las instituciones públicas recortan gastos corrientes e inclusive personal. No sé en qué cabeza no se percataron que no se podía hacer ninguna obra más. Se invirtió dinero pero nunca se conversó”, expresó.

Futuro

“Desidia”, así prevé la administración venidera Coello, en donde a decir ella, el nuevo Alcalde se tendrá que enfrentar a un Concejo Cantonal desigual, en donde tendrá que dejar a un lado el antagonismo y enfocarse en entablar una ‘amistad’ con sus ediles.

“Todos esperamos caras nuevas, la gente ya no quiere ver a los exalcaldes ni exconcejales, porque ellos ya tuvieron su oportunidad para aprobar, desaprobar, rechazar o plantear nuevos proyectos u ordenanza. Sin embargo, que el Alcalde no ‘arrastre’ a sus concejales traerá problemas”, dijo.

No obstante, fue enfática en decir que lo más recomendable es que los ediles dejen sus líneas políticas y se independicen. “Para que no haya fricciones en las decisiones de las comisiones de mesa, reuniones ordinarias y extraordinarias”, dijo.

Recomendó además una fiscalización pero sin odios, que vendría de parte del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs). “Reuniones muy interdepartamentales para que se pueda cumplir todas las ordenanzas y todo lo ofrecido. Pero si usted sólo va a meter preso a los anteriores, no va a trabajar nada y se le va a pasar cuatro años en disputas, enfrentamientos y acusaciones”, finalizó.

Que queda

El actual alcalde Jorge Domínguez manifestó que seguir con las obras ya enrumbadas en su administración, sería lo único que quedaría pendiente. Nombró el proyecto de agua potable, la contratación del consorcio Ingenio (que se encarga de la recolección de basura) y las fases que faltan para remodelar el Malecón Eloy Alfaro.

“Hay tres obras fundamentales que significan salud y vida para todos los ciudadanos. En este caso, el sistema de recolección de basura, modelo de gestión que lo iniciamos y va a continuar para los próximos siete años. El servicio de agua potable que hemos conseguido con una inversión de 57 millones que vendrá a dar una solución definitiva a 200.000 quevedeños. Conjuntamente con el alcantarillado sanitario, faltan 55 mil casas, en nuestra gestión se logró proveer a 10 mil predios. Y, por supuesto, continuar con las obras ya enrumbadas como el Malecón y el soterramiento”, indicó Domínguez, agregando que dichas obras jamás se realizaron en los 75 años de cantonización. (EHL)

Una fiscalización objetiva sería la primera decisión que debería tomar el nuevo Alcalde”.

Eloy Mueckay.

Exalcalde de Quevedo (1984-1988).