‘Quiero hacer una política diferente y de servicio’

AUTORIDAD. Ingrid Mora Bustos ganó la concejalía de la mano de Fuerza Compromiso Social, lista 5.
AUTORIDAD. Ingrid Mora Bustos ganó la concejalía de la mano de Fuerza Compromiso Social, lista 5.
RELACIÓN. La concejala asegura que Dios y su familia son un pilar fundamental.
RELACIÓN. La concejala asegura que Dios y su familia son un pilar fundamental.
FAMILIA. Su madre la acompañó en su posesión el pasado miércoles 12 de junio.
FAMILIA. Su madre la acompañó en su posesión el pasado miércoles 12 de junio.

La edil Ingrid Mora Bustos, indicó que el servicio lo aprendió en la iglesia. Eso la motivó a llegar más allá.

Redacción QUEVEDO.

“Una política para servir y no para servirse”, es la frase de la concejala Ingrid Mora Bustos, de 50 años de edad. Su vocación como catequista la encaminó a incursionar para una curul en el Concejo de Quevedo, ahora que lo consiguió dice que vivirá una política diferente.

Mora nació en la ciudad de Esmeraldas, pero toda su infancia, niñez y adultez la vivió en Quevedo. Aquí reside con sus dos hijos (Adriana y Jair) y su madre. Realizó sus estudios en la Universidad Laica Vicente Rocafuerte, donde se graduó como Ingeniera Comercial.

En entrevista a Diario La Hora nos contó un poco más a fondo cómo es su vida:

¿Cómo es Ingrid Mora Bustos?

Una mujer con sentimientos cuando ve la necesidad del otro, una mujer que le gusta ayudar, que no importa el día ni la hora para ver por las personas necesitadas. Soy muy creyente, yo creo en mi Dios que me da la vida, si realmente conocieran ese Jesús no estuviéramos así, la felicidad nos da Él.

¿Dónde nació ese fervor?

Toda mi vida he sido catequista y por ahí empezó los primeros caminar míos. Recuerdo mucho el padre Leonardo Reasco que en paz descanse, me dijo: ‘Ingrid, aquí hay algunas viviendas mira tú que es’. Me voy a Guayaquil y allí empieza mi trayectoria que es Hogar de Cristo, mi segunda casa.

¿Hogar de Cristo es una iglesia?

No, es una fundación de la iglesia. Cuando empecé en el 2000 se dieron unas primeras 300 viviendas a nivel de la provincia de Los Ríos por el Fenómeno del Niño y comencé a vivir una realidad que no conocía. En Babahoyo abrimos una oficina por medio de la Diócesis; damos casas y hace unos años atrás microcréditos.

¿Antes de ser política solo trabajaba para la fundación?

Sí, este caminar de política lo llevo hace mucho tiempo, recuerdo que antes se hablaba de hacer una política distinta, de servicio; mas no de servirse, ver tantas injusticias que se han venido dando empecé a dar los primeros ‘pininos’.

¿Cuál es la política de servicio que usted menciona?

La política de servicio es estar pendiente del ser humano, ayudarlo y acompañarlo en sus derechos, que se cumplan y respeten. Hacerlo voluntariamente, que nadie nos obligue.

¿Qué hace en sus tiempos libres?

Me gusta reunirme con mis amigos, conversar, salir con ellos. Con mis hijos en las mañanas los suelo dejar en el colegio, al medio día almuerzo con ellos y cuando los veo a las 19:00 para revisar tareas y hacer la merienda; los tiempos son en familia y amigos.

¿Qué es lo que más recuerda de su etapa estudiantil?

En la Universidad (Guayaquil), para mis compañeros Quevedo era un pueblo, a mí me daba coraje escuchar, me preguntaban: ‘¿Cuándo vamos a conocer tu casa?’ Yo les decía que cuando vengan tenían que dejar su carro unas tres cuadras, coger un caballo, pasar un río y llegar a mi finca (ríe). Hasta que conocieron y se dieron cuenta que no vivía en el campo sino en la ciudad (ríe).

¿Cómo le gustaría ser recordada?

Como una mujer que estuvo pendiente de la gente, que ayudó, como una mujer que no se dejó, como una mujer que realmente ama a sus hijos y a su madre, como una mujer que realmente quiere el bienestar de una ciudadana. Es servir y no servirse, el interés general, ante todo.

¿Algún mensaje?

Es una alegría haber llegado a este curul, pero también un temor porque uno viene con muchas ganas de poder servir, ojalá no nos trunquen ese camino. Dios no lo permita y realmente lo que hice en 20 años de trayectoria en Hogar de Cristo lo que fue servir a muchas familias así mismo lo quiero hacer aquí. Detrás de mí, hay mucha gente colaboradora, de iglesia, que ha palpado una necesidad de un pueblo, ellos son los que van a hacer mis compañeros en este caminar. (EHL)

Muy personal

Detalles

Tiene 50 años.

Dos hijos (Adriana y Jair).

Es catequista.

Está al frente de un proyecto de migración en Quevedo.

Estudios

Perfil profesional

Escuela Gabriela Mistral y Nuestra Señora de Fátima.

Colegio Fiscal Señoritas Quevedo.

Universidad Laica Vicente Rocafuerte.

Es ingeniera Comercial.

¿Qué le hace reír?

Todos los chistes que hacen mis amigos, soy muy risueña a pesar de ser sentimental. Ver a la gente feliz sin necesidades.

¿Qué le hace llorar?

Cuando veo situación que no está en mis manos ayudar, veo muchas dolencias, hay familias que solo comen una vez al día.

“La política de servicio es estar pendiente del ser humano, ayudarlo y acompañarlo en sus derechos, que se cumplan y respeten. Hacerlo voluntariamente, que nadie nos obligue”.