Redacción QUEVEDO
Eran las 05:30 de ayer cuando una llamada de emergencia al 911 alertaba a la Policía de un presunto delito de robo ocurrido a unos ciudadanos en una estación de servicio.
Al llegar hasta el sitio, los agentes se encontraron con varios conductores quienes se quejaron de que tres sujetos, fuertemente armados, los habían desvalijados de sus pertenencias mientras se encontraban descansando.
La indignación de las víctimas era evidente, puesto que los antisociales se les habían llevado desde los teléfonos celulares hasta los documentos y dinero que poseían. Además, los despachadores de combustibles también habían sido asaltados.
Tras conocer del presunto delito, los uniformados iniciaron un operativo por diferentes sectores con la finalidad de dar con el paradero de los presuntos sospechosos, pero no lograron encontrarlos. (MZA)