Se conoce como símbolo de la medicina dos emblemas altamente difundidos: el primero de ellos, ‘la vara de Esculapio o Asclepio’, y el segundo, ‘el caduceo de Hermes’.
Estos símbolos se utilizan indistintamente para identificar tanto información médica como a los profesionales de la salud y los centros de atención.
La vara de Esculapio o Asclepio
Esculapio es el nombre romano de Asclepio, hijo del dios Apolo y Coronis, una mujer mortal. De acuerdo a los relatos homéricos, Escupalio vivió en Tesalia y se dedicó a la medicina.
La vara de Esculapio o Asclepio representa una vara o bastón con una serpiente enrollada en ella. Esta vara es el símbolo del árbol de la vida, según lo señala el ‘Diccionario de los símbolos’ de Jean Chavelier y Alain Gheertbrant.
Caduceo de Hermes o Mercurio
Otra tradición identifica como símbolo de la medicina al caduceo de Hermes. Este se forma de un caduceo con dos serpientes enrolladas de forma simétrica y que enfrentan sus miradas en el extremo superior. En este, además, se sobreponen un par de alas desplegadas.
En este caso, las serpientes representan lo benéfico y maléfico a la vez. El caduceo representa el punto de equilibrio entre estas dos fuerzas contrarias.
De acuerdo con la leyenda, las dos serpientes que se combaten una a la otra representan también el caos primordial. Por ello, el caduceo entre ellas representa la paz.
Las dos alas representan a Hermes, el mensajero de los dioses, quien orienta a los seres vivos en sus cambios de estado, de acuerdo con Chavelier y Gheertbrant. Llamado Mercurio por la tradición romana, Hermes también es responsable del equilibrio entre el agua y el fuego.