Un hombre fue herido por antisociales y dos asesinadas en menos de un días en Quevedo.
Redacción QUEVEDO
Ni la pandemia, ni el toque de queda, mucho menos el estado de excepción impidieron que Felipe Montesdeoca fuera asesinado la madrugada de ayer en el sector Playa Grande de la parroquia Nicolás Infante Díaz.
El hombre habría recibido un disparo por la costilla perforándole el pulmón. Fue sepultado con estricto control policial en el cementerio municipal de Quevedo. Según Jennifer Vanessa Cano, familiar, el ahora occiso, habría recibido amenazas hace días de su presunto verdugo, quien a decir de ella era un primo de su exmujer.
El victimario era conocido como ‘Jimato’, por su nombre Jimmy, pero también se menciona que hubo un cómplice en el momento del homicidio. “No queremos que esto quede en la impunidad, quiero que lo metan preso a él y a Julio, entre los dos fue el asesinato”, lamentó la mujer. Montesdeoca era soltero y no deja hijos en la orfandad.
A puñaladas
Esa misma madrugada, José Cevallos Flores, de 18 años, recibió varias puñaladas en la avenida Walter Andrade y calle Novena del sector El Guayacán, de la parroquia 7 de Octubre.
Según el parte policial, había tenido inconvenientes con unos ciudadanos de nacionalidad venezolana, un poco antes del violento hecho.
Marianela Rodríguez, familiar del ahora fallecido, indicó que se enteró de la noticia cerca de las 04:30, cuando ya estaba en la morgue de Quevedo.
“Sabemos que había salido y le han hecho esto. Está confirmado que son tres y uno es venezolano porque ya la Policía lo encontró en la 17 de Marzo, atrás de Los Guayacanes, todo ensangrentado”, indicó.
Walter H., uno de los testigos del hecho, le informó a la Policía que a eso de las 04:00, se encontraba realizando sus rondas como guardia privado, escuchó que un grupo de seis personas aproximadamente decían: ‘cógele, cógele’, refiriéndose al ahora occiso, quien supuestamente minutos antes le había robado un reloj a uno de los venezolanos.
Tras las rejas
Personal de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased), revelaron que uno de los presuntos asesinos sería identificado como Rawy G.
Antes de la detención, el hombre le manifestó a la Policía que había sido víctima de robo y por esas circunstancias se encontraba allí. Sin embargo, la Policía observó que tenía una herida en la mano izquierda.
Dentro de las investigaciones policiales, realizaron un trayecto de las manchas de sangre hasta llegar a una casa de dos pisos donde constataron que habita el detenido junto a otras personas.
Allí fueron encontradas Alicia A., y Lesbia G., quienes quedaron aprehendidas como presuntas sospechosas del hecho sangriento.
Una prenda de vestir con manchas de sangre color marrón, un arma blanca y un par de zapatos con sangre, fueron recogidos para las investigaciones.
También se revisaron las cámaras de seguridad cerca del sector, donde se pudo verificar que el occiso fue agredido por tres personas de sexo masculino en presencia de dos personas de sexo femenino. Por lo que Policía busca otros sospechosos.
Otro caso violento
Cerca del mediodía de ayer, César Armando Suárez Moreira, fue herido por unos antisociales cuando se encontraba en el interior de la clínica Maternidad Rotary, ubicada en la vía a Valencia.
Según el parte policial, cuando llegaron hasta el sitio de la emergencia encontraron a Suárez se encontraba en el suelo pidiendo auxilio con una herida en el abdomen producida por un arma de fuego.
El hombre habría contado que un sujeto armado le disparó y luego salió a precipitada carrera sin dejar rastros.
Luego de unos minutos, se llamó al ECU 911 solicitando una ambulancia, pero los vecinos optaron por trasladar al herido en un carro particular hasta el hospital del IESS.
El departamento de Criminalística de la Policía Nacional informó que el hombre se encuentra estable y fuera de peligro tras la operación