Romo a juicio político

La Asamblea cumple hoy con el sueño de muchos: el juicio político a la ministra de Gobierno, María Paula Romo. La acusación que finalmente cuajó es un supuesto incumplimiento de funciones por haber estado al mando de la Policía cuando se utilizaron bombas lacrimógenas vencidas.

Romo asegura que no le informaron sobre la fecha de caducidad previo a su uso y nadie ha presentado pruebas que demuestren lo contrario; ni la Policía, ni sus detractores, ni quienes promueven el juicio en el Legislativo.

La causal pudo haber sido cualquiera de las cuatro presentadas desde que un avión del Estado, tras un viaje oficial, la dejara en la playa en lugar de su ciudad de residencia. Pese a cómo se amarren los votos hoy, su carrera política no habrá terminado.

Figura controversial, sí; una de las más fuertes de este débil gobierno, ganó el respeto del alto mando de la Policía, lideró el COE en lo peor de la pandemia y apareció junto a ministros de casi todas las carteras -en situaciones en las que nada tenía que ver un ministro de Gobierno- pero que requerían una imagen fuerte, quizá la única.

Romo, primera mujer frente al ministerio de Gobierno, ha ocupado el cargo más alto al que llegó alguien de su mitad de la población, a excepción solo de la efímera presidencia y vicepresidencia de Rosalía Arteaga, a quien también tumbó -ilegalmente- el Congreso.

Otros se retiraron, pescan cargos en el exterior o recorren el mundo. Romo insistió en que el juicio político sea presencial, pero los asambleístas optaron por escudarse tras una pantalla, frente a alguien que lo que sí sabe es dar la cara con dignidad.

No puede haber coexistencia pacífica en el reino ideológico; la coexistencia pacífica corrompe.”

Jiang Qing (1914-1991) Política china.

El Congreso supo levantarse a la altura de la situación por un acto vigoroso que honrará su memoria.”

Bartolomé Mitre (1821-1906) Periodista y estadista argentino.