¿Cuidado con la gastroenteritis?

Las infecciones intestinales se adquieren por ingestión de agua o alimentos contaminados o por transmisión de persona a persona por la ruta fecal-oral.

La gastroenteritis infecciosa es una inflamación y/o disfunción del intestino producida por un germen o sus toxinas, que da lugar a una alteración de su capacidad para regular la absorción y secreción de sales y agua, produciendo diarrea.

Las toxinas pueden estar preformadas en los alimentos o bien ser liberadas por el agente causal una vez ingerido y tras invadir la mucosa desde la luz intestinal. Es un proceso agudo que cura espontáneamente en unos pocos días, por lo que se suele hablar de gastroenteritis aguda.

Los síntomas que aparecen con mayor frecuencia en general son diarrea (disminución de la consistencia de las heces con un aumento del número de deposiciones) asociada o no a vómitos y dolor abdominal tipo retortijón, con constante sensación de defecar. No suele cursar con fiebre ni quebrantamiento del estado general y, en general, cede en 3-5 días.

¿Cuáles son las causas de gastroenteritis?

En general, las infecciones intestinales se adquieren por ingestión de agua o alimentos contaminados o por transmisión de persona a persona por la ruta fecal-oral.

En el caso de la Salmonella, que es en nuestro país el agente bacteriano más frecuentemente implicado en las gastroenteritis aguda bacteriana, la transmisión se produce por la ingesta de pollos, huevos de gallina y productos lácteos, siendo raro el contagio de persona a persona o por agua.

Si se produce como consecuencia de la ingesta de toxina preformada (vibrio Cholerae, Bacillus cereus, E. Coli enterotoxigénica, S. Aureus, Clostridium perfringens, Cryptosporidium), el periodo de incubación hasta la aparición de los síntomas es corto (pocas horas), las heces habitualmente son voluminosas abundantes y acuosas, no presentan moco, sangre o pus y el dolor abdominal es poco importante. La probabilidad de contraer una infección intestinal depende de la virulencia del agente patógeno ingerido y de su cantidad.

Puede padecerlo cualquier persona. Influyen factores propios del individuo invadido, como una menor secreción de ácidos gástricos, una menor motilidad intestinal, alteración de la flora intestinal habitual o un estado inmunodeprimido que puede aumentar la susceptibilidad a la infección, reducir la cantidad necesaria de germen para iniciarla y potenciar su gravedad.

¿Cómo se previene?

Puesto que la vía más frecuente de adquisición de una infección intestinal es a través de los alimentos o agua contaminada, se debe cuidar el estado de los productos ingeridos, tanto su conservación, como su cocinado.

No beber agua de ríos o fuentes estancadas, lavar adecuadamente la verdura que se va a ingerir cruda, evitar el consumo de productos que tengan entre sus ingredientes huevo crudo y hayan estado sometidos a altas temperaturas y un adecuado cocinado de carnes pueden evitar muchas infecciones intestinales.

Desde hace poco está disponible en las farmacias una vacuna oral contra uno de los virus que con mayor frecuencia producen gastroenteritis: el rotavirus. Sólo está admitida su administración a niños muy pequeños.

Los síntomas más habituales son:

Diarrea.

Dolor abdominal

Malestar general

Fiebre

Escalofríos

FUENTE

https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/enfermedades/gastroenteritis-infecciosa-aguda