El sol del medio d pega de lleno en la arcilla de la cancha del complejo deportivo del Banco Central. Mariana esten el fondo, muy concentrada en el juego con su entrenador y hermano, Juan Carlos (22 as).
Su padre estal filo de la tiza, sigue de cerca el desempe de la menor de sus cinco hijos. El paelo en su cabeza, el cabello recogido pantalones cortos y una camiseta floja, ella sigue concentrada en su juego. Su rostro no muestra ni una sonrisa.
Sus ojos claros, de mirada profunda, no pierden de vista la pelota. Su hermano la intenta impresionar con una pelota rida, pero Mariana, la mimada de la casa, responde con mucha soltura y la pone al otro extremo de su maestro. Es un buen punto.
Mientras tanto en la cancha su padre, Jorge, la mira y conversa de lo difil que resulta la carrera deportiva de su peque de 17 as. «Es complicado, pero la apoyamos todos (su familia), para que contin en el tenis. La falta de apoyo en este pa es increle, pero pese a las adversidades logramos mantener la prtica de Mariana», manifestJorge.
Y la preocupaci es justificada por la falta de apoyo de los responsables del deporte ecuatoriano. Mariana no tiene un entrenador propuesto por la Asociaci, tampoco cuenta con recursos para poder desplazarse a competencias de mayor renombre.
Pero pese a las circunstancias adversas la joven compatriota estentre las mejores del mundo de su categor. En el Circuito Cosat 2002 es considerada una de las m destacadas deportistas. En los partidos jugados en Caracas lleghasta las semifinales, en Barranquilla cayen segunda ronda y ahora inicia su participaci en Cuenca, donde se espera que llegue hasta la final.
En ocasiones TAME, le brinda auspicio y colabora con sus viajes, pero no existen otras empresas que se interesen en ayudar y proyectar a la joven tenista.
«Me gusta mucho jugar al tenis y es que tengo como sue llegar a estar entre las mejores del mundo dentro de la carrera profesional. El apoyo es casi nulo, mi familia es la que me apoya en todo», comenta Mariana, la promesa tentica del Ecuador.
El colegio
Sus estudios le causan ciertos problemas. Cursa el quinto a en el colegio Beckerel, su especialidad es fico matemico y al graduarse no sabe cual sersu futuro m allde la raqueta de tenis.
«En el colegio me apoyan mucho, allse apoya al deporte, pero es muy difil porque lo que mis comparos hacen en varios meses yo lo tengo que realizar en dos semanas y eso es una gran responsabilidad. En ocasiones me amanezco para cumplir con mis tareas.
«Cuando estoy en competencias no me dedico a estudiar. Me concentro mucho en lo que tengo que hacer en la cancha y dar los mejor de mi para alcanzar los sues que tengo», comentMariana.
El deporte
«Es muy difil prepararme porque los hombres no quieren entrenar con las mujeres y eso complica un poco. Cuando salgo a las competencias resulta un poco incomodo. En el Cosat se duerme en cuartos que se comparten con seis personas».
Por otro lado estel mimo apoyo que se brinda en el pa a los deportistas, peor si no son futbolistas.
«Cuando se va a pedir apoyo para los compromisos que se tiene resulta que no hay presupuesto para las mujeres o que no se puede porque hay problemas econicos, pero una semana m tarde se mira como los mismos que negaron el apoyo gastan en publicidad para la selecci», concluyMariana.
En Ecuador existen grandes deportistas que no tiene las posibilidades para desarrollar sus capacidades y cumplir con las exigencias deportivas para estar entre las mejores del mundo.
El gobierno nacional debe apoyar decididamente a los ecuatorianos y ecuatorianas que se destacan y que son los portadores de la imagen del pa y contribuyen para mejorar la autoestima de un pueblo maltratado por los malos gobiernos y la crisis econica.