La paralización del comercio afecta a todos los negocios tanto a los grandes como a los pequeños en lo que tiene que ver con la liquidez debido a los escases de ventas. Sin embargo, los negocios grandes tienen solvencia que es respaldada por sus activos, lo que no sucede con los pequeños negocios.
Así pues, actividades económicas como restaurantes, taxismo, ferreterías, ventas ambulantes, mecánicas, peluquerías, cibers, almacenes de ropa y otros, requieren alta rotación para sobrevivir, esto es vender día a día, por lo que no trabajar más de 30 días a muchos negocios ya los tiene en la quiebra. A esto se suman los costos fijos derivados principalmente de arriendos, situación donde pierden todos; esto es arrendador y arrendatario por la falta de actividad. Para otros negocios la situación es más completa, y ahí es donde se encuentran los bares, discotecas y gimnasios, ya que durante este año no se autorizarán actividades de concentración de personas.
Santo Domingo es una de las ciudades que más está afectada, ya que es la ciudad que más negocios tiene en relación a su población, donde 6 de cada 10 dólares que se mueven proviene del comercio.
Ante esta situación, propongo cinco ideas o estrategias que se puede aplicar en el corto plazo para enfrentar la crisis desde nuestros pequeños negocios:
- Incursione en el servicio a domicilio. No importa lo que venda.
- Desarrolle tiendas virtuales. Potencie Facebook y WhatsApp.
- Elimine de su catálogo los productos caros. Quédese solo con la línea básica de lo que vende.
- Active en su negocio las transacciones electrónicas, para minimizar el uso del efectivo.
- Seguridad y más seguridad. Tome en serio la bioseguridad, para dar confianza al cliente de que no se contagiará en su negocio.