‘La mano de Dios’

Los de la generación superior a la de finales de los 80, mucho menos a la generación de los 90, no les tocó admirar el que ha sido considerado el mejor partido de fútbol de la historia: Argentina con Maradona e Inglaterra; corría el minuto 6 del segundo tiempo y Maradona tomó el balón fuera del área y tras una serie de rebotes el balón quedó en el aire, Maradona y Peter Shilton fueron por el balón, el puño argentino tocó el balón primero y entró a la red.


A pesar del reclamo de los ingleses, el gol, fue valido luego ocurrió el gol del siglo, Maradona se quitó a medio equipo inglés para poner su segundo gol.


Antes de los Aguinaga, Morales, Cevallos, Delgado, de los Muñoz, incluso los Valencia, Achiler, de la Cruz, al jugar al fútbol, de niños siempre queríamos ser Maradona.


En el Mundial los dioses no se jubilan, por humanos que sean, sólo por eso a pesar de que Messi haya superado adversidades colosales nadie iguala al “Diego”.


El embate político internacional desató la amarga situación por la guerra de las Malvinas en 1985, precisamente con el imperio Británico estaba fresca esa afrenta; ponerse la remera 10, después de él siempre será imposible, aunque lo parezca.


Maradona el más humano de los dioses, luego del gol con la mano corrigió la plana en cinco minutos realizó el gol más hermoso del siglo: “Barrilete cósmico, de que planeta viniste, gracias Dios por el futbol, por Maradona, por estas lágrimas, por ese Argentina 2 Inglaterra 0”, Víctor Hugo Morales relató esa poética el gol con el que atraviesa todos los tiempos.


A treinta años de esa hazaña, que mis ojos vieron, este gesto para la memoria y para esa patria llamada infancia.