Desde hace más de cuatro años, dos mujeres británicas luchan para inscribirla como su hija, bajo sus apellidos.
Unos 30 días tendrá la Corte Constitucional (CC) para resolver la acción extraordinaria de protección presentada por una pareja de lesbianas para que se les permita inscribir a una niña con los apellidos de ambas.
Durante la audiencia de sustanciación que se realizó ayer, el defensor del pueblo, Ramiro Rivadeneira, indicó que este tribunal tiene “el reto histórico de garantizar los derechos de la pequeña «Satya”.
La niña nació en Ecuador, hace cuatro años y medio, pero el Registro Civil no aceptó inscribirla con los apellidos de las dos mujeres, Helen Bicknell y Nicola Rothon, quienes son británicas y residentes en el país.
En la diligencia, que se desarrolló por alrededor de tres horas, Tatiana Ordeñana, jueza sustanciadora de este proceso, consultó la situación jurídica de la menor, que enfrenta una situación que no tiene precedentes.
La defensa respondió que, “al habérsele negado el registro conforme a su identidad”, ambas tuvieron que llevarla a Reino Unido y lograron que se le entregara un pasaporte como ciudadana inglesa.
La Cancillería ecuatoriana, por su parte, le entregó una visa de amparo a una de las dos mujeres, pero a la niña la registró con el apellido de una y con el del padre de la segunda. Se determinó eso luego de su orden de cédula, dijo.
De ese modo, la pequeña tiene un documento de identidad, que no refleja su conformación familiar real, donde además se menciona que su lugar de nacimiento es Malchinguí, Pichincha, pero en la casilla correspondiente a ciudadanía se indica que es británica.
Expectativa
Esta audiencia movilizó a la Corte, no solo a las involucradas, sino también a activistas glbti y a la exasambleísta María Paula Romo, quien tramita un Amicus Curiae (para aportar con su opinión ante el tribunal) a favor de la menor.
«Satya y su madre han esperado cuatro años para que se resuelva este caso», expresó Romo, quien opinó que la Corte debería tener en cuenta la jurisprudencia que existe en el sistema interamericano al respecto y experiencias en otros países.
José Guerra, director tutelar de este proceso, explicó los argumentos de derechos de igualdad e identidad en los que se basa la demanda, que fue admitida a trámite en 2012.
Sin embargo, Carola Samaniego, abogada de la Procuraduría del Estado, adujo que en este caso no se ha sustentado que haya existido vulneración a la tutela judicial y de los derechos de la niña. (RVD)
Apoyo y oposición
Decenas de activistas se concentraron ayer en los exteriores de la CC, mientras se desarrolló la diligencia. Llegaron con carteles, tambores y silbatinas, bajo la consigna de que “no se puede limitar el amor”.
A ese mismo lugar, se dio cita un grupo de mujeres de la organización Provida, quienes indicaron que defienden a la familia entendida como aquella encabezada por un hombre y una mujer.
LAS CIFRAS:
4
años sin encontrar una salida tiene este caso.
3
horas duró la sesión.