ATRACCION FATAL


Por Ramiro Ruiz R.


Nunca se asistió a una expectativa fuerte por las elecciones de presidente de los EE.UU. Terminó una campaña de escándalos y acusaciones. Hillary Clinton se mantuvo firme y no perdió la serenidad ante las arremetidas de Trump. Los ciudadanos norteamericanos observaron con paciencia el estilo, las actitudes y las ideas de los candidatos.
Debatieron hasta con humor y nunca falto la ironía, el zarpazo hiriente de Trump. Cada uno presentó sus programas de gobierno y soluciones a los problemas del país, en especial, el económico, la migración, relaciones internacionales…
Los norteamericanos son personas informadas. Es un hábito saludable. Respetan los medios de comunicación. Y los medios se apoyan en la investigación profunda y la publicación de la verdad.
La empresa privada está hasta estos días a la expectativa. El día de las elecciones, la bolsa de valores informó bajones en los mercados de algunas empresas. Esta agresión se produjo porque Trump ganó las elecciones y la ola de caídas de acciones se extendió desde México hasta Japón.
En la historia de EE.UU. nunca se escuchó ideas ni se observó actitudes y programas de gobierno que corresponde al populismo. Trump manejó perfectamente el sentimiento de los electores. Particularmente el que está uniendo a la gente como es el odio, el racismo y la exclusión.
El mundo actual se ha beneficiado de la globalización, primero de los medios de comunicación y de la economía. Pero no ha beneficiado a la vida pacífica y digna de las personas. EE.UU. es un país de oportunidades, con una democracia fuerte y libertades protegidas en las leyes. Los ciudadanos del mundo encontraron trabajo y bienestar.
Sin embargo, Trump amenaza la democracia y la libertad. Dijo abiertamente su antipatía a los mexicanos y extranjeros de los países del Medio Oriente. Mientras Hillary Clinton puso su conocimiento de más de 30 años de experiencia política y administración pública, defensa irrestricta a la democracia y solución a los problemas internacionales a través del diálogo.
Los pueblos sufren de una atracción fatal: el rechazo, la burla, la ambición, el autoritarismo y la inteligencia malévola. Este atractivo es un nuevo producto político que cuatro países latinoamericanos exportan, sin aranceles, y han consumido muy bien millones de ciudadanos norteamericanos.