Exigen un nuevo acto de disculpas públicas por caso de racismo en Esmil

QUITO

La puerta trasera de la Escuela Militar (Esmil), al norte de Quito, se convirtió esta mañana en un escenario de protesta de la comunidad afroecuatoriana.

Fue el lugar escogido por Fernando Encalada, capitán dado de baja del Ejército, para cumplir una orden judicial.

Encalada debía disculparse con Michael Arce, a quien truncó su carrera militar en 2011 al convertirlo en objeto de maltrato por su color de piel.

Arce, quien llegó acompañado de sus familiares y amigos, sin embargo, no aceptó ni los términos ni el lugar escogido para las disculpas.

Se retiraron del sitio sin siquiera oir a Encalada, al ritmo de la marimba que, esta vez, no fue una música de fiesta sino de protesta.

Las autoridades de la Fiscalía y de la Defensoría del Pueblo advirtieron que pedirán al juez que se repita este acto al considerar que no se cumplió con la reparación. (RVD)