Las áreas protegidas en Ecuador tienen un rol específico para preservar la flora y la fauna

Naturaleza. El Parque Yacuri, ubicado en Loja, alberga diversidad de flora y fauna. (Foto: Archivo de La Hora)
Naturaleza. El Parque Yacuri, ubicado en Loja, alberga diversidad de flora y fauna. (Foto: Archivo de La Hora)

Estos espacios buscan frenar las amenazas a las que se enfrentan los bosques y áreas verdes como consecuencia del desarrollo humano.

Ecuador cuenta con 53 áreas protegidas en las que se enmarcan los parques nacionales, las reservas ecológicas, biológicas, geobotánicas, marinas, de producción de fauna y de vida silvestre; y áreas nacionales de recreación.

Todo este territorio agrupado en el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP) comprende 19,1 millones de hectáreas, que representa cerca del 20% del territorio nacional, aproximadamente, que pretende salvaguardar la biodiversidad y el bienestar de todos los seres vivos.

Las áreas protegidas son ecosistemas de gran biodiversidad que contribuyen a la regulación del clima regional, reducir los impactos de eventos climáticos extremos, además proporcionan bienes y servicios ambientales a las comunidades.

Lo que guarda cada uno

Sus distintas denominaciones dependen de la extensión que posean y su aprovechamiento particular. Así, los parques nacionales: Galápagos, Machalilla, Cayambe Coca, Cotopaxi, Llangates, Sangay, El Cajas, Podocarpus, Yacuri, Sumaco-Napo-Galeras, Yasuní… son áreas de tamaño grande (más de 10.000 ha), donde se protegen paisajes, ecosistemas completos y especies. Las actividades permitidas son las de investigación, el monitoreo ambiental y turismo de naturaleza. Aquí es prohibida cualquier explotación u ocupación.

Las reservas marinas: Galera San Francisco, El Pelado, Galápagos y el santuario marino Darwin y Wolf, en el archipiélago, son áreas de tamaño variable con miras a la conservación de los ecosistemas y las especies marinas relacionadas a este ambiente. La pesca y otras diligencias deben ajustarse a las necesidades de conservación.

Las reservas ecológicas: Manglares Cayapas-Mataje, Mache-Chindul, Manglares Churute, Arenillas, El Ángel, Cotacachi-Cayapas, Antisana, Los Illinizas, Cofán-Bermejo, áreas naturales de extensiones variables con poca intervención humana, tienen recursos naturales sobresalientes y especies de gran significado nacional. Aquí se guarda materia genética, diversidad ecológica, bellezas escénicas, fenómenos especiales y la regulación ambiental para la investigación científica y la educación ambiental.

RIQUEZA. Vista de tiburones Martillo en el Santuario Marino Islas Darwin y Wolf (Galápagos)  (Foto: Pelayo Salinas/FCD)
RIQUEZA. Vista de tiburones Martillo en el Santuario Marino Islas Darwin y Wolf (Galápagos) (Foto: Pelayo Salinas/FCD)

Más espacios importantes

En cuanto a las reservas biológicas Limoncocha, El Cóndor, El Quimi, Cerro El Plateado y Colonso-Chalupas, son áreas poco alteradas y con mínima presencia humana de tamaño grande (más de 10.000 ha) que pretenden conservar ecosistemas completos y sus especies. En estos lugares solo se da paso a la investigación biológica, ecológica y ambiental.

EL DATO
Cada 18 de julio se celebra el Día Nacional de Áreas Protegidas en Ecuador.Las reservas de producción de flora y fauna Puntilla de Santa Elena, Manglares El Salado, Chimborazo, Cuyabeno… ayudan en la conservación de ecosistemas y especies susceptibles de manejo. Las acciones prioritarias están relacionadas con la conducción sustentable de la vida silvestre, la educación ambiental, la restauración de ecosistemas y el turismo orientado a la naturaleza.

Los refugios de vida silvestre: La Chiquita, Estuario del río Esmeraldas, Estuario del río Muisne, El Pambilar, la isla Corazón y Fragatas, Marino Costera Pacoche, El Zarza, Manglares El Morro, la isla Santa Clara, Pasochoa… son áreas de conservación pequeñas que favorecen a cuidar especies y ecosistemas amenazados con un adecuado manejo del hábitat, investigaciones y el monitoreo ambiental, que permitan una satisfactoria restauración.

Hay más protección

Las áreas nacionales de recreación son: Playas de Villamil, Parque Lago, Los Samanes, isla Santay, El Boliche, Quimsacocha, de tamaño mediano, donde se conserva el paisaje natural que puede estar medianamente alterado y en el cual se permite la presencia humana. Las actividades principales son el turismo y la recreación, la restauración de ecosistemas, la investigación y el monitoreo ambiental.

El Pululahua es la única reserva geobotánica declarada en el país y es un área destinada a la conservación de la flora silvestre y los recursos geológicos sobresalientes, con el fin de asegurar la continuidad de los procesos evolutivos, naturales y al mismo tiempo propender a la recuperación de las áreas alteradas por la intervención humana. Por su valor histórico, cultural, paisajístico y científico, brinda oportunidades recreativas turísticas y de educación cultural a visitantes nacionales y extranjeros. Constituye un banco de germoplasma de especies de flora y fauna en vías de extinción. (CM)

Datos

Parques nacionales

El 87% del Parque Yasuní está ocupado por bosque siempre verde, que posee mucha variación florística y árboles maderables.

El Parque El Cajas posee alrededor de 500 plantas vasculares distribuidas en 243 géneros y 70 familias.

Se considera que 71 especies de flora endémica de Ecuador están en El Cajas.

En Machalilla se registran 150 especies endémicas de flora, 81 de mamíferos, 270 de aves y 143 de peces.

El Parque Nacional Cayambe-Coca posee bosques de páramo, bosques verdes y matorrales.

Alrededor de 800 especies de plantas vasculares, 231 de aves, 46 de mamíferos y 23 de anfibios y reptiles se han descrito en el Parque Llanganates

En el parque Sangay existen 586 especies endémicas de flora, de las cuales el 45% son orquídeas.

En el Parque Podocarpus se encuentran plantas medicinales y se ha determinado que en total hay 600 especies de flora.

280 especies de plantas existen en el parque Yacurí, distribuidas en los bosques siempre verdes, de neblina, de páramo y de matorral.

La variedad de pisos ecológicos y hábitats ha hecho que el Parque Sumaco-Napo-Galeras albergue fauna de los trópicos húmedos de la Amazonía y de la vertiente oriental de los Andes.