EFE
Nicolás Maduro es un dictador para Estados Unidos. Steven Mnuchin, secretario del Tesoro, en un comunicado, dijo que “las elecciones ilegítimas” del domingo pasado confirman que “Maduro es un dictador que ignora la voluntad del pueblo venezolano”.
Al hilo de esto, el Gobierno estadounidense impuso sanciones económicas directas contra el gobernante venezolano, entre las que figura la congelación de activos bajo jurisdicción estadounidense.
«Sancionando a Maduro, EE.UU. deja claro nuestra oposición a las políticas de este régimen y nuestro apoyo a la gente de Venezuela que busca devolver el país a una democracia completa y próspera», remarcó Mnuchin.
Con esta designación, quedan congelados todos los activos que Maduro pueda tener bajo jurisdicción estadounidense y se prohíbe las transacciones financieras con él por parte de ciudadanos de EE.UU.
De este modo, Estados Unidos agregó a Maduro a la lista de 13 funcionarios y exfuncionarios venezolanos a quienes sancionó la pasada semana por abusos de Derechos Humanos, corrupción y acciones para minar la democracia. Mnuchin agregó que queda abierta la puerta a más sanciones contra funcionarios venezolanos.
«Cualquier persona que participe en esta ilegítima Constituyente podría ser expuesto a futuras sanciones por minar el proceso democrático y las instituciones en Venezuela», subrayó.
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, H.R. McMaster, ironizó y dijo que el presidente venezolano Nicolás Maduro se une a un «exclusivo» grupo de líderes sancionados junto al presidente sirio, Bachar al Asad; el norcoreano Kim Jong Un y el de Zimbabue, Robert Mugabe.
