Los ancestrales mercados indígenas siguen latentes

CONOZCA. Los mercados indígenas son el mejor sitio para acercarse a las costumbres y saberes de esos pueblos.
CONOZCA. Los mercados indígenas son el mejor sitio para acercarse a las costumbres y saberes de esos pueblos.

Artesanías, alimentos, ropa y animales son, entre otros, los artículos que se venden en las exhibiciones.

Las principales ferias indígenas que se encuentran a lo largo de la Sierra ecuatoriana son una de las muestras más vivas y atractivas de la cultura milenaria que conservan los diversos pueblos de Ecuador.

En días específicos de la semana, dependiendo del lugar donde se haga la muestra, las personas (vendedores y compradores) llegan desde diferentes puntos, en las primeras horas de la mañana, a llenar los mercados de colorido por las vestimentas y el bullicio por las negociaciones y el ‘regateo’ en el precio de lo que ofertan.

Originariamente, este tipo de comercio servía para vender el producto de la cosecha, la vestimenta indígena propia de cada región y abastecerse de nuevos productos y animales (vacas, cerdos, borregos, cuyes, conejos y gallinas), pero hoy se encuentra también artículos que nada tienen que ver con la cultura indígena.

COMERCIO. El mercado de Guamote es una demostración de la concentración indígena.
COMERCIO. El mercado de Guamote es una demostración de la concentración indígena.

Una gran feria en Cotopaxi

En Latacunga, ciudad que está a los pies del volcán Cotopaxi, al sur de Quito, se realiza una gran feria los martes de cada semana, a la que confluyen indígenas, pero en la actualidad hay más mestizos.

Sin embargo, en Pujilí, un pequeño pueblo situado a 12 km al oeste de Latacunga, vive su comercialización los miércoles y domingos. Allí se encuentran figuras y utensilios de barro elaboradas por manos indígenas, que también se especializan en artesanía en cerámica. Las alcancías en forma de animales son infaltables en estas muestras, el objetivo es incentivar el ahorro de centavo en centavo, señalan los vendedores.

Los jueves, la feria está en Saquisilí, ubicado en el sur de Latacunga y destacado por la venta de máscaras de madera que las hacen las manos indígenas, trabajo que le ha dado prestigio. Pero, además, es importante la comercialización de animales. Este mercado se despliega en cinco plazas independientes, donde es posible vivir el desenvolvimiento del indígena al comercializar sus productos agrícolas, artesanías y animales.

Plazas convertidas en una tradición

Hay un día especial en la semana cuando las plazas de algunos pueblos se convierten en mercados que congregan a indígenas que llegan desde las montañas o zonas apartadas para comprar o vender.

Un ejemplo es la feria de Otavalo, en Imbabura, que se ha tornado internacional, pues es un punto que los turistas no dejan de visitar y comprar. Esta funciona todos los días en la Plaza de los Ponchos, pero su punto máximo de visitas, negociaciones y ventas es los sábados, cuando comerciantes y compradores madrugan para obtener los mejores artículos, como sombreros, joyas, textiles bordados, figuras de barro, recuerdos y más.

Se dice que el mercado indígena de Otavalo es uno de los más grandes de Sudamérica. (CM)

VARIEDAD. La venta de animales es una parte importante de la actividad en los mercados indígenas.
VARIEDAD. La venta de animales es una parte importante de la actividad en los mercados indígenas.

En Zumbahua

Se dice que uno de los más antiguos mercados indígenas andinos en el país está en Zumbahua, que se encuentra asentada en las montañas, a 65 km al oeste de Pujilí, y que agrupa una comunidad indígena bastante grande.

La feria de los sábados es el espacio ideal para que muchos de los indígenas artistas natos como los pintores de Tigua, que crean cuadros coloridos que cuentan la cotidianidad de la vida en el campo, vendan el producto de su inspiración.

Asimismo, hay quienes trabajan cestos y elaboran máscaras de junco y otras artesanías que se mezclan con la venta de llamas, caballos y otros animales que sirven de mucho para la movilización humana en zonas tan altas y frías.

Además, Zumbahua está muy cerca de la laguna Quilotoa, formada en el cráter del volcán del mismo nombre, que se caracteriza por sus aguas turquesas.

Para socializar

El día de feria en las comunidades, además de llenar de vida al sector donde se realiza, por el colorido de la vestimenta, el bullicio y las ventas en sí mismo, sirven para que los indígenas que vienen de lejos, desde sus comunidades, socialicen con sus similares.

Esa fecha aprovechan para comprar y vender, comer alguna que otra golosina (platos tradicionales). Este intercambio permite que socialicen, conversen y se enteren de lo que ha sucedido en la semana, acordarse de anécdotas, informarse de eventos y más.

Ferias

Días de realización

Otavalo: Abierto todos los días.

Latacunga: Martes

Pujilí: Miércoles y domingo

Salcedo: Miércoles y domingo

Saquisilí: Jueves

Zumbahua: Sábado

Guamote: Jueves