QUITO
Minutos después de las 9:00 se instaló en la Corte Nacional de Justicia la audiencia de sustitución de medidas cautelares que solicitó el fiscal general Carlos Baca Mancheno, respecto del vicepresidente Jorge Glas y su tío Ricardo Rivera.
El juez nacional Miguel Jurado, a cargo del proceso por asociación ilícita del entramado de corrupción de Odebrecht, no aceptó el pedido del abogado del vicepresidente, Eduardo Franco Loor, de revocar esta diligencia jurisdiccional, por cuanto instaló la audiencia para escuchar razones del Fiscal General.
Baca Mancheno advierte un riesgo de fuga en el caso de Rivera, ya que su dormitorio tiene puerta a un patio con otras tres puertas, una de las que da a la calle.
Se observa demasiadas visitas de personal de TV Satelital y, además, Rivera no cumple la medida cautelar de usar todo el tiempo el grillete electrónico.
En cuanto al vicepresidente, el fiscal Baca Mancheno ha verificado un “agravamiento de los elementos materiales” que en su momento le pidieron pedir la prohibición de salida del país de Glas, a raíz de los testimonios anticipados de Conceicao Santos, el testigo protegido Alfredo A., y de la recepción de la información remitida desde Estados Unidos, “datos que permiten comprobar una primera sospecha de asociación” entre Glas y su tío.
Baca también ha advertido el intento de Glas de contaminar un proceso técnico aseverando que es “perseguido político”, cuando ha tenido amplio derecho a la defensa y la opción a presentar pruebas de descargo.
Además, Baca ha dicho que la asociación ilícita es un delito medio, y que Fiscalía abrió investigaciones para establecer los delitos fines o subsecuentes, que podrían ser lavado de activos, captación ilegal de dinero, cohecho o concusión.
En ese sentido, no solo pide prisión preventiva para Glas, sino prohibición de enajenar bienes y congelamiento de cuentas bacarias.
El juez Miguel Jurado suspendió la audiencia hasta las 17:00, a fin de analizar el pedido del fiscal general y tomar una decisión
