Salvatore Foti
La consulta es de total autoría de Moreno y de su equipo. Esto significa que, para bien o para mal, toda la agenda política que se está llevando a cabo es propiedad del actual mandatario, quien se la está jugando, tanto con su movimiento como con sus coidearios.
Claro que lo hizo tan bien, que absolutamente toda la oposición se quedó boquiabierta, pues mejores resultados jamás hubiese obtenido. Por esto la reaparición de Guillermo Lasso en la vida política del país solo ratifica la miopía de la oposición y de sus representantes. Está bastante claro que el objetivo del oficialismo es acabar, definitiva y permanentemente, con Correa, el correísmo y, ¿quién sabe?, hasta con una parte de la revolución.
Los protagonistas siguen siendo los mismos, pero esta vez, además de Correa y sus allegados, hay que añadir en el juego a Moreno y a su nuevo frente, quienes desean cambiar las reglas para su propio beneficio.
Querer apropiarse de las ideas del proyecto político del señor Presidente, afirmando que esta es la consulta del excandidato a la Presidencia, es una idea de las tantas que se añaden al gran número de demostraciones de falta de iniciativa e imaginación de los supuestos protagonistas de la vida política del país.
La seudo-oposición está, como siempre, un paso atrás del oficialismo que sigue liderando la vida política del país con el apoyo incondicional de la población, lo que le permitirá llevar adelante cualquier proyecto.
A la oposición solo le queda reorganizarse y empezar a entender que necesita una agenda política propia, ajena al correísmo, al morenismo y a AP. Es imperativo que encuentren una agenda para enfrentar las próximas elecciones, por ejemplo, de las seccionales a las alcaldías, de manera original e imaginativa. Seguir la agenda de los otros no les va a beneficiar y más bien los va a hundir. ¡Ojalá aprendan!