Llegó el invierno por lo que es necesario conducir con precaución cuando hay lluvia.

PRECAUCIÓN. La baja velocidad, la distancia adecuada y ser precavido ayudan a la hora de conducir cuando llueve.
PRECAUCIÓN. La baja velocidad, la distancia adecuada y ser precavido ayudan a la hora de conducir cuando llueve.

Es un enemigo de la conducción. Resta visibilidad y contribuye a que se incrementen los percances.

La presencia de la lluvia trae esperanzas para el campo, para alimentar la tierra y obtener buenas cosechas, pero al mismo tiempo constituye un problema para los conductores tanto en las ciudades como en las carreteras, porque les resta visibilidad y si no se maniobra un vehículo con prudencia se pueden presentar incidentes con daños materiales, personales y sicológicos.

Según Leopoldo Quezada, instructor de manejo, la lluvia es un obstáculo a la hora de conducir un vehículo, por lo que es necesario poner en práctica los consejos que dan los profesionales como por ejemplo no aplastar a fondo el acelerador para evitar derrapes (deslizamiento con desviación lateral de la parte trasera) y posteriormente desastres.

Los vehículos grandes y pequeños deben estar siempre en las mejores condiciones, así lo dispone la Ley de Tránsito. Llantas en buen estado, todas las luces funcionando, herramientas indispensables para casos de emergencia, botiquín de primeros auxilios y sobre todo que el vehículo sea manejado por personas capacitadas y con los documentos respectivos en regla.

Ojo con la velocidad

El artículo 191 de la Ley de Tránsito dice que los vehículos livianos deben circular en la zona urbana (ciudades) a 50 km por hora, en las carreteras hasta 100 km por hora y en las vías perimetrales, como la Simón Bolívar en el Distrito Metropolitano de Quito, hasta 90 km por hora y en las curvas la velocidad debe reducirse a 50 y 60 km.

Pero Quezada dice que las velocidades máximas deberían ser aplicadas solo en casos de verdadera emergencia, caso contrario la circulación debería hacerse a menos velocidad y sugiere disminuir en 20 km al límite máximo establecido.

Y cree que la velocidad debe reducirse aún más cuando llueve por el hecho de que se pierde visibilidad con la caída del agua sobre el parabrisas y las ventanas del auto. El instructor recomienda, por ejemplo, si se circula por una vía perimetral, viajar a 50 km por hora y reducir la velocidad a 40 km cuando llegan a una curva.

Pero también es necesario, con lluvia moderada o intensa, prender las luces intermitentes del vehículo como señal de aviso a los otros conductores con los que comparten vía.

Mantenga la distancia

Cuando los vehículos están detenidos en la vía, la distancia prudencial mínima con respecto al que le antecede en el mismo carril es de 3 metros, de tal forma que le permita detenerse con seguridad ante cualquier emergencia, dice la Ley de Tránsito, y Quezada añade que cuando hay presencia de lluvias lo aconsejable será guardar mayor espacio entre los vehículos.

Comenta que, de acuerdo a estudios técnicos, quien circule a 40 km por hora necesita por lo menos 10 m de distancia del carro que está delante, lo que le permitirá una adecuada maniobrabilidad. (CM)

La lluvia resta visibilidad

La visión periférica, que permite observar en un ángulo de 180º, es fundamental cuando se maneja y no se ve afectado cuando hay luz. Pero cuando llueve, el conductor pierde en gran medida ese sentido de la visión por el efecto del agua en el parabrisas, los vidrios laterales y la misma carretera, indica Leopoldo Quezada, instructor de conducción.

A la disminución visual se suma la afectación de las luces de los carros que vienen en sentido contrario, que provoca los deslumbramientos (una alteración visual por luces extrañas), que forman una especie de nube fosforescente que hace perder la visión.

Según la Ley de Tránsito las luces medidas de los autos deben estar encendidas obligatoriamente entre las 06:00 y las 18:00 si las condiciones atmosféricas (neblina, lluvia,) lo exigen.

Documentos válidos

Los conductores en general están obligados a portar su licencia, permiso o documento equivalente, la matrícula y la póliza de Seguro Obligatorio de Accidentes.

Quienes manejan ciclomotores, motocicletas, tricar, cuadrones, deben portar una licencia Tipo A; la Tipo B sirve para conducir automóviles y camionetas con acoplados de hasta 1,75 t de carga útil o casas rodantes y la Tipo F para automotores especiales adaptados de acuerdo a discapacidad.

Deben portar licencia profesional Tipo C quienes conduzcan taxis o camionetas de alquiler; la Tipo B para los que están al frente de los vehículos de transporte de pasajeros; la Tipo D para quienes manejen autos de servicio de pasajeros inter cantonales e inter provinciales.

Consejos

A la hora de manejar

Conduzca a la defensiva.

Respete las velocidades.

Utilice correctamente las luces y las direccionales.

Observe y respete las señales de tránsito.

Use los cinturones de seguridad

Y sobre todo sea cortés.