Ecuador reprueba en el índice de Estado de Derecho

SITUACIÓN. La renovación parcial de la Corte Nacional de Justicia es el último proceso que ha sido blanco de varios análisis.
SITUACIÓN. La renovación parcial de la Corte Nacional de Justicia es el último proceso que ha sido blanco de varios análisis.

El índice de la situación del Estado de Derecho, que realiza la organización World Justice Project, correspondiente a 2016, sitúa a Ecuador en el puesto 91, de 113 países evaluados. El número uno es Dinamarca, seguido de sus vecinos nórdicos, mientras que los últimos son Afganistán, Cambodia y Venezuela, que ocupa el puesto 113.

“El índice no mide solo cuestiones relativas a la Justicia sino también a gobernabilidad y Estado de Derecho”, explica María Dolores Miño, jurista y docente de la Universidad de las Américas. “Pienso que es un indicador sobre la calidad de la democracia, desde una perspectiva sustancial y no solo formal, que es el tema de ir a las urnas”. El ranking del Ecuador en la región es de 25, de 30 países evaluados.

En efecto, los factores que se utilizan para establecer el índice son los contrapesos entre los poderes del Estado, la ausencia de corrupción, la transparencia de la información, la situación de los derechos fundamentales, orden y seguridad, la implementación y cumplimiento de las leyes, y la situación de la Justicia. La peor calificación de Ecuador es en el parámetro de límites al poder gubernamental (103/113) mientras que su mejor calificación es en cuanto a la ausencia de corrupción (74/113).

“En la última década se malentendió el concepto de democracia a una imposición de voluntad mayoritaria y no se logró un Estado donde mayorías y minorías puedan convivir óptimamente”, señala la catedrática Miño.

¿Cambios?
Ella ha observado, sin embargo, que con el nuevo Régimen, inaugurado el 24 de mayo, se nota una reducción de la confrontación entre el Estado y todos quienes lo intentan fiscalizar, lo cual se podría ver reflejado en el índice del próximo año.

113
países fueron evaluados. Venezuela ocupa el último lugar. “El cambio de actitud del nuevo Gobierno incide de manera positiva en la mejora de algunos de los estándares que analiza el índice. Por ejemplo, el hecho de que existan menos probabilidades de criminalización contra una persona que critica al Gobierno, aumenta la posibilidad de fiscalización y disminuye, al menos en teoría, la posibilidad de corrupción e impunidad”.

La jurista destaca la devolución de la personería jurídica a la fundación Pachamama. “No obstante, es todavía un periodo muy estrecho para notar cambios de fondo”. (MMD)