Juan Sebastián Vargas
En 1981 cuando asumió la presidencia Osvaldo Hurtado luego de la trágica muerte del presidente Roldós el Congreso eligió como vicepresidente a León Roldós, su hermano, un catedrático y político intachable, honorable y democrático, un acierto sobre todo por su brillante trayectoria, de la misma forma en 1995 cuando Alberto Dahik fue destituido por el Congreso, el presidente de ese entonces Sixto Durán Ballén envió una terna liderada por Eduardo Peña Triviño, Pedro López y Raúl Gangotena, siendo elegido el primero, de la misma manera se trataba de un catedrático de mucho respeto y exministro de educación, íntegro en su proceder.
En el 2000 cuando asumió Gustavo Noboa luego de la salida de Mahuad, se eligió a Pedro Pinto Rubianes, un economista probo y sobre todo un caballero de mucho respeto y honorabilidad. En el 2005 Alfredo Palacio llegó al poder luego de la caída de Gutierrez y se eligió como vicepresidente al exalcalde de Cuenca, Alejandro Serrano Aguilar, persona de prestigio y mucha consideración especialmente en el Austro ecuatoriano.
Muchos de estos personajes que llegaron a la Vicepresidencia por casualidad, si se lo quiere llamar así, tienen un denominador común y es que a excepción de Peña Triviño, los demás no fueron parte de los gobiernos de ese entonces y más bien se trataban de individuos no tradicionales y generaban una imagen de calidez para los ecuatorianos, pese a que en ciertos casos llegaron a tener diferencias con el Presidente como pasó con Roldós, siempre mantuvieron el orden y compostura.
Pues bien, regresando al presente, la terna enviada por Moreno para elegir a su vicepresidenta no se asemeja en absolutamente nada a las características descritas sobre las anteriores designaciones, es más, muchos de los ecuatorianos nos sentimos decepcionados, pues creemos que es más de lo mismo, era la oportunidad histórica de Lenín de enviar una terna de altura, tenemos tantos personajes valiosos en el país y lamentablemente caemos en personas que no tienen la talla, seguramente a la publicación de este artículo tendremos ya la elección, esperamos que responda a las exigencias del cargo y no a las presiones políticas de sus líderes, incluyendo a Correa.