¿Qué significa cuidar de ti mismo?

A veces se siente que cuidarse es un sinónimo de pecado o  ser egoísta pero  no es así, decifraremos lo que realmente significa el autocuidado, sus propósitos y beneficios para ti y tu familia.

¿Nos preocupamos por nosotros mismos? Definitivamente sí. Y aquellos que dicen que no, intenten cuidarse. Al sentirnos mal, ofendidos, deprimidos o simplemente de mal humor, también nos centramos en nosotros mismos, ¿en quien más?, entonces, ¿cómo nos cuidamos para estar bien?

Muchos de nosotros no sabemos con plena certeza  qué significa realmente este concepto.

¿Confundimos el autocuidado con el egoísmo tal vez?

Ropa. Comida. TV. Cosmética. Internet. Estas son nuestras únicas necesidades, al parecer. ¿Y qué tiene que ver el egoísmo con eso?

No es que pensemos solo en nosotros mismos, sino que solo cuidándonos  podremos prestar atención y energía a nuestros seres queridos.

Cuidar de ti mismo es la clave para equilibrar la vida.

– Comience con lo más simple: dormir bien, descansar lo suficiente, pasatiempos agradables y placenteros, ir al médico (cuando es necesario), divertirte cuando quieres divertirte. Con el tiempo, encontrarás el ritmo adecuado para ti y comprenderás qué forma de autocuidado es la más adecuada personalmente.

– Cuidar de nosotros mismos es solo lo que planeamos a propósito, no algo que suceda por sí solo. Siempre es nuestra elección consciente. Si estás planeando algo, añádelo al calendario, anótalo, cuéntalo a otros para consolidar tu intención. Busca activamente oportunidades para invertir la energía en ti mismo. Y no es egoísmo para nada.

Solo cuidando de nosotros mismos podremos cuidar de nuestros familiares y así encontrar la felicidad.

Ahora vamos a aclarar la cosa de cómo cuidarse, la instrucción es simple:

  • Si te molesta algo – siéntelo y define si vale la pena visitar al médico o se resuelve por ti mismo.  Pero resuélvelo ya, necesitas estar bien.
  • Previene enfermedades en vez de curarlas. Es una clave esencial. Mantén la higiene básica.
  • El autocuidado básico como descanso, comida saludable y suficiente (ni mucha ni poca), algunas vitaminas o suplementos (si se siente falta de energía o nutrientes de calidad), actividad física mínima, mantener buen humor y resistir a los múltiples factores del estrés.
  • Encuentra tu zona de confort. Sal de allí a descubrir el mundo y tus posibilidades. Y regresa hacia allá cuando te sientes cansado o lo ves necesario. Es tu espacio de recuperación y calma.
  • Actúa sin miedo y decidido: hay una vida y no hay que dudar mucho.
  • No dejes que te molesten ni afecten de mala forma, ni intentes influir a los demás. Piensa en ti.
  • Y cuando estableces tu energía y salud básica, tu experiencia y puntos de vista, enfócate más en los seres queridos, que te necesitan tanto. Sin nada de presión. Porque el amor es todo. Por la ley de energías no solo tu ser querido va a sentirse bien sino tu también. Mucho mejor.

Así que empieza de a poco a aplicar esas pequeñas acciones de autocuidado (y auto cariño) con el propósito de ser una persona fuerte y autosuficiente, que puede lucir bien, sabe sonreír, tiene cosas que ofrecer y puede compartir su energía con los demás, sin quejas, sin sobreesfuerzos ni sacrificios. Todo muy natural. (T.S)