‘Horror en el Sexto C’, de Alexis Serrano, ganó en prensa escrita. Un texto contra la violencia sexual a la niñez.
El equipo de investigación de diario El Universo, integrado por Mónica Almeida, Patricia Sandoval y Paúl Mena, con un trabajo sobre los contratos del Gobierno de Rafael Correa con Petrochina, ganó anoche el Premio Nacional ‘Eugenio Espejo’ 2017, otorgado por la Unión Nacional de Periodistas (UNP).
Durante la ceremonia, con ocasión de los 78 años de la UNP, también fue premiado Alexis Serrano, jefe de Información de La Hora, en la categoría prensa escrita, con el reportaje titulado: ‘Horror en el sexto C’, relacionado con el abuso sexual por parte de un profesor en el centro educativo Aampetra.
En televisión, el jurado entregó el galardón a Paúl Romero (Ecuavisa), que en el terreno trabajó el reportaje: ‘De las heridas de la guerra al milagro de la paz’.
Gustavo Cevallos Velásquez, con 40 años de trayectoria, ganó el premio en radiodifusión. Su labor consistió en tres series radiofónicas sobre ‘Los comunicadores más famosos del mundo; el mundo de las cosas; y los mejores autores y compositores de la música nacional’.
Jean Cano, de Plan V, fue premiado como el mejor articulista.
EL DATO
Por su trayectoria, Thalía Flores y Lolo Echeverría recibieron una placa de reconocimiento.En tecnología e innovación, Gabriela Ruiz, de la página Barra espaciadora, obtuvo la distinción con el tema: ‘Contaminación de los ríos en Santo Domingo de los Tsháchilas’.
La Contraloría, con su equipo periodístico, destacó en comunicación para el desarrollo.
Reconocimiento a la valentía
Guadalupe Fierro, presidenta de la UNP, resaltó la recuperación valiente de la prensa ecuatoriana, después de una década de “hostigamiento” por parte del poder central.
“Nuestro compromiso se mantiene intacto con la defensa de la libertad de expresión como Derecho Humano”, dijo, y seguidamente se refirió a la necesidad de reformar la Ley de Comunicación, a la que denominó “carcelera del pensamiento”.
Adicionalmente criticó a una “institución tan desvergonzante” como la Superintendencia de Comunicación, “encargada de supervisar el pensamiento” de los ecuatorianos. (SE)