7 veces SÍ

Por: MARÍA LUISA GÓMEZ DE LA TORRE GÓMEZ

Comprometidos con el cambio que queremos los ecuatorianos para tener un aliciente modo de vida revestido de transparencia, respeto, ecuanimidad, sin autoritarismo y abuso de poder, demostrando distinción a toda prueba y no precariedad, miseria humana, iremos a las urnas para pronunciarnos a favor de lo que merecemos quienes amamos la Patria, la sentimos y queremos días mejores.

¿A nosotros qué nos han dado? Han desfilado seres en la administración de Esmeraldas que actuaron sometidos y no lucharon por los intereses de la ciudad y la provincia, se robaron La Concordia, Las Golondrinas y pretendieron La Sexta porque allá habían votos y tierras fértiles, los vende Patria no han sido declarados “no gratos” todavía. Sonrieron de oreja a oreja ciertas personas y como expresaron que “estábamos bien”, “que no pasaba nada”, no nos dieron nada, en cambio en Manabí hubo gente pensante, altruista y líder para sacar adelante la penuria provocada por el terremoto y cadena de sismos, ha sido atendida de mejor manera.

Centros de salud por doquier y clínicas particulares que atiendan por convenio con el IESS, hospitales fueron dados a otras provincias, a nosotros a medio andar, nos abolieron el emblemático Delfina Torres Viuda de Concha y todo quedó bien gracias, conformistas como siempre. El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social fue dueño de los designios para nombrar las altas autoridades del Estado que actuaron sometidas a lo dicho en las sabatinas y afloraron los aplausos locos e irreflexivos.

La justicia fue empoderada por quien ahora no tiene alfombra roja para deslizarse, en su lugar recibe huevazos y tomatazos por el pueblo que ha despertado ante el robo descarado. Las sombrillas son para el aguacero y el sol pero la obligatoriedad al golpe hacen que se luzcan con ellas. Los coidearios de altura ahora están señalados, prófugos, presos, ajusticiados mientras los denunciantes de los atropellos cometidos siguen liderando por la vanguardia del país, otros están calladitos.

Cuando las caravanas llegaban a la tierra del blanco y verde se parchaban los huecos, se sembraban palmeras de la noche a la mañana, se pintarrajeaba de verdeflex para decir que aquí no pasaba nada. ¿Se devolvió la plata por las coimas por robos descubiertos? ¿Se decomisó los bienes adquiridos en la Patria tierra sagrada? ¿Y de los millonarios de la noche a la mañana qué? ¿Se sancionó a los profesores violadores sexuales o se los premió cambiándolos de centros educativos? ¿Acaso no fue fácil extender certificados de primaria sin haberla estudiado, o tener bachillerato y licenciatura sin haberlos nunca vistos en los centros educativos y en la universidad?