Camorra y mafia

Patricio Durán

Los últimos acontecimientos que se han dado en el campo político, entre altos funcionarios del Estado, nos han dejado anonadados a los ecuatorianos. Lo que vemos por los medios de comunicación parecería ser una película de la Mafia, en la que unos saben demasiado de los otros y los chantajean. El video presentado por el Fiscal General dejó mal parados al Presidente de la Asamblea Nacional quien apenas puede defenderse, y al ex Contralor Pólit quien ha contraatacado.

Los correístas están en estampida. Hay un éxodo de los seguidores del expresidente Correa quienes al verse sin su caudillo no saben qué hacer, sienten un vacío de poder y empiezan a atacarse entre ellos. Hay quienes asemejan la estructura del gobierno correísta a la Mafia, en donde existe una estructura vertical, un “capo di tutti capi” que es comúnmente reconocido, y que de alguna manera mantenía el control otorgando cierta autonomía y privilegios a sus huestes.

Ahora, sin un cabecilla, la Mafia correísta ha devenido en Camorra revolucionaria, cuya estructura es más horizontal que vertical, dado que no hay un “capo” que lidere, por lo tanto esto da lugar a todos estos enfrentamientos por el control del poder. Todos tienen información para negociar, para chantajearse entre ellos.

He traído a colación este tema de la Camorra y de la Mafia, por cuanto los últimos acontecimientos así lo ameritan. Los audios y videos que circularon la semana pasada con un par de funcionarios correístas como protagonistas, son los que podríamos escuchar en películas como El Padrino” o “La Cosa Nostra”.

La única salida a este maremágnum de corrupción es la renuncia a sus cargos de las principales figuras políticas que están en bronca. Si tuvieran algo de dignidad, si fueran conscientes del daño que le hacen al pueblo ecuatoriano, ya deberían haber renunciado.